Tres factores se fusionaron para un desenlace tan amargo en lo tocante al béisbol profesional en la isla de Margarita y la situación de la itinerante franquicia que aún no termina de consolidarse desde la expansión de la cual fue protagonista por allá por la temporada 1991-1992 cuando nació bajo la denominación de Petroleros de Cabimas.
Una de las varias razones por las cuales Cabimas fracasó como sede de esta franquicia fue precisamente las condiciones del estadio «Víctor Davalillo». Un parque de pelota sobre el cual hubo esfuerzos de inversión que no fueron suficientes. Muchas fueron las quejas del estado del terreno de juego, principalmente en la zona del outfield y de la pobre iluminación.
Precisamente son estos dos elementos los que ahora mismo tienen en paupérrimo estado al estadio de la referida franquicia itinerante que hoy se denomina Bravos de Margarita. Los tres factores son: Crisis sociopolítica del país entre los años 2017-2019; pandemia del COVID-19 entre los años 2020-2022 y el ‘abandono’ del ente encargado de su mantenimiento hasta nuestros días.
Así luce actualmente la sede de los Bravos
Por cómo se ve este estadio 🏟 Guatamare en Margarita, @labarrabrava parece destinado a seguir jugando la #LVBP 23-24 fuera de la Isla.
📹 @SelloDeportivo1 pic.twitter.com/PyxLAx9Rh1
— Rossen Piñate (@RossenR) June 21, 2023
Mucha expectativa y gran inversión
Tras el fracaso de Petroleros de Cabimas, el doble fracaso de Pastora de Occidente, denominación que adquirió la franquicia al salir de Cabimas y tratar de compartir sede en Maracaibo con Águilas del Zulia, y el de Pastora de Los Llanos, que tampoco resultó en la histórica Acarigua, los propietarios de la franquicia decidieron establecerla en la isla de Margarita, que alguna vez fue sede de la franquicia que hoy es Navegantes del Magallanes, pero bajo la denominación de Orientales, para entonces, una plaza hambrienta de béisbol y emocionada por tener un equipo de la LVBP.
Sin embargo, aquel proyecto comenzó con la expectativa que hoy carece, porque, incluso, tras bastidores se habla de mover definitivamente a la franquicia de Margarita y ‘acomodarla’ en Miranda, Macuto, Puerto Cabello o Araure. Desde luego, que estas iniciativas ni siquiera han salido a la palestra de las discusiones, pero están allí en una gavetica que solo hay que abrirla para sacarlas.
Inversiones notables
Para aprobarle a la franquicia su mudanza a Margarita, el estadio debía ser adecuado a las condiciones mínimas para MLB y así se hizo. El estadio fue remozado para albergar, primero a unas 9 mil personas y posteriormente se expandieron las tribunas, incluyendo par de gradas traseras para incrementar el aforo a 18 mil personas.
El estadio bautizado como Estadio Nueva Esparta, situado en el sector Guatamare, en la isla de Margarita, fue sede de dos Series del Caribe, la de 2010 y la de 2014, que, entre otras cosas tuvo el atractivo turístico de la isla y que fueron calificadas de exitosas por la cantidad de público que asistió al evento deportivo.
Fungía entonces el ‘Nueva Esparta’ como uno de los mejores campos de pelota del circuito rentado de béisbol venezolano, pero, llegó la llamada crisis y lamentablemente ésta arropó al béisbol y más particularmente a Margarita y a su estadio.
Se hicieron trabajos muy notables en todas las áreas del recinto deportivo, siempre imrpiméndole la identidad corporativa de ser sede de los Bravos, franquicia que buscaba consolidarse, calar y llegar al corazón de los margariteños, tal como ocurrió con Caribes.
Zulia superó, Margarita no
Algo similar ocurrió en la temporada 2018-2019 de la LVBP en Maracaibo con el estadio que sirve a las Águilas del Zulia, el Luis Aparicio ‘El Grande’ que para el inicio de esa temporada no pasó la inspección. El mal estado del terreno de juego y de la iluminación hicieron que MLB negara el permiso para que se pudiese realizar allí algún tipo de juego de béisbol profesional.
El conjunto naranja pasó 19 días de campeonato alejado de su ciudad. Fueron cinco compromisos los que disputaron las Águilas como home club sin jugar en el Luis Aparicio. Esos encuentros se llevaron a cabo entre el José Pérez Colmenares de Maracay y el José Bernardo Pérez de Valencia.
Esa situación se generó en un año signado por la violencia sociopolítica, la guarimba y la crisis marcada por escasez, apagones y carestía. Sin embargo, Águilas se movilizó junto con la administración de entonces en el estadio, que estaba a cargo de la Gobernación del Zulia de Omar Prieto y pudieron hacerse a tiempo los trabajos para que la lejanía de las Águilas no fuese tan prolongada como lo es ahora la de Bravos con su sede.
La pandemia empeoró las cosas en Margarita
Paralelamente a esta situación, el estadio de Margarita iba desmejorando paulatinamente, principalmente, porque, en esos años, la isla padeció una bravísima crisis de agua potable y, evidentemente, no había manera de habilitar el sistema de riego del parque de pelota, lo que hizo que el terreno de juego se fuera deteriorando.
Pero, al llegar el COVID-19, todo se derrumbó. El ‘abandono’ obligado de todos estos espacios públicos por el confinamiento obligatorio hizo mella en el estadio de Guatamare, más que en las otras siete plazas de la LVBP.
Y sufrió más, porque, ya venía padeciendo un paulatino deterioro que se acumuló y se agravó durante el año y medio de restricciones por la pandemia.
Pero, además, en tiempos de pandemia y crisis, cuando regresó el béisbol al país, se sumó otra situación que contribuyó con la debacle, las sanciones económicas. Éstas pusieron a la liga contra la pared y muchas alianzas y negocios de los cuales se sostenía la liga se cayeron o se vieron suspendidos, obligando a hacer hiperesfuerzos para armar campeonato con criterio de escasez.
De hecho, hubo un equipo que una de esas temporadas, la 2021-2022, armó su campeonato con autogestión e ingresos propios, es decir sin ningún tipo de inversión ni de alianzas de inversión, lo cual desnudó la crisis económica que atravesaba la liga.
Así las cosas, había que ajustar los parámetros a lo mínimo funcional y ello, sumado al deplorable estado del parque de Margarita, obligó a la directiva de Bravos, por recomendación de la liga, a mudarse transitoriamente de Margarita a un lugar donde no implicara tanto gasto en traslado y logística para el resto de los equipos el viajar a Nueva Esparta.
Eso se dio, a raíz de la temporada burbuja que se hizo aun en plena pandemia, pero sin fanático en los estadios, fue la 2020-2021, que se encapsuló el circuito en tres estadios burbuja: Maracay, Valencia y Caracas. Luego, la burbuja se extendió a Macuto y Barquisimeto, sacando la peor parte los equipos de las regiones más distantes: Águilas del Zulia, Caribes de Anzoátegui y los Bravos de Margarita.
La normalidad no llegó para los Bravos
Para la zafra 2021-2022, la normalidad comenzó a llegar rápidamente y todos los equipos ya contaban con sus respectivas sedes para participar en el campeonato, menos Bravos de Margarita y la razón, el estado deplorable del estadio ‘Nueva Esparta’ y ha sido esa la razón por la cual, hasta el día de hoy, Bravos sigue de franquicia itinerante, fungiendo de anfitrión en patio ajeno.
Se le facilitaron las cosas esta temporada gracias a la mudanza de Leones del Caracas al estadio Monumental de Caracas ‘Simón Bolívar’ que dejó el espacio en el Universitario para que los Bravos lo compartiesen con Tiburones de La Guaira, equipo que, por alguna razón no se ha querido mudar a Macuto, donde está el otro de los dos mejores estadios del país.
@sportsvenezuela ¡El renovado clubhouse de los Bravos de Margarita en el Universitario! Keito Homma mostró en su cuenta de Instagram cómo luce el clubhouse de los margariteños en su casa para esta temporada de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional⚾️ #LVBP #Beisbol #Bravos #Caracas #Clubhouse #Universitario ♬ original sound – Sports Venezuela
Esta temporada pinta buena para los Bravos. Han tenido una campaña bastante buena y ahora mismo son dueños en solitario del tercer lugar en la tabla de clasificación y, en el peor de los casos, si Bravos pasara por algún slump momentáneo, parece muy difícil que Margarita no clasifique a la semifinal.
Sin embargo, seguirán turnándose como anfitriones entre Caracas (UCV) Y Macuto, mientras parece fantasmagórica la situación de su estadio en Margarita y las condiciones actuales del mismo. Por ahí hay un asomo de recuperación del espacio por parte de la Gobernación de Margarita, pero, detalles al respecto no hay.
Tampoco hay mucho en cuanto a imágenes actuales de las condiciones del estadio, pero, decir que se necesitan más de 700 mil dólares para ponerlo óptimo es hablar de una inversión enorme, lo cual significa que el espacio está bastante malo.
Un breve paseo histórico
Se le llamó Guatamare por 51 años por estar situado en el sector homónimo de Margarita que celebró su construcción en 1956. Desde entonces el estadio sede del equipo Bravos de Margarita ha experimentado sucesivas remodelaciones: en 1976, para ampliar su aforo a 9 030 espectadores; en 1979, quizá su remozamiento más dramático, cuando fue reconstruido y ampliado.
En 2007, tras nuevas ampliaciones, fue rebautizado como Estadio Nueva Esparta, y en 2009 se amplió su capacidad para recibir a más de 15 000 fanáticos durante la quincuagésima segunda edición de la Serie del Caribe del año siguiente, con las selecciones campeonas de República Dominicana, Puerto Rico, México y Venezuela.
Su más reciente acicalamiento ocurrió en 2013 con el fin de acondicionarlo para la Serie del Caribe de 2014, hospedando a los equipos campeones de México, Venezuela, Puerto Rico, República Dominicana y Cuba. Su graderío aumentó entonces para acoger a 18 000 fanáticos, a quienes una enorme Virgen del Valle, patrona del oriente de Venezuela, saluda desde la entrada principal.
No siempre fue la sede de los Bravos de Margarita. Antiguamente era la casa donde los equipos Caribes de Oriente y Navegantes del Magallanes hacían rugir a las gradas. Y ha prestado su grama no solo al béisbol, sino el baloncesto y hasta el fútbol, en 1980, cuando fue la sede de la oncena de Primera División, Pepeganga Margarita.
Estadio Guatamare 1989 🇻🇪 hecho para 🎮 #efootballpes2021
Estadio de béisbol que fue improvisado para fútbol para ser la sede del Pepeganga Margarita.
Muchas gracias a @tomasmbosch76 por compartirnos videos de su valioso archivo para poder recrear este campo. pic.twitter.com/ryymVluBzT
— RetroVenFan (@RetroVenFan) August 21, 2023
¿Qué es lo que está más dañado?
El terreno de juego está bastante deteriorado, hay que hacerle un trabajo completo, según fuentes cercanas a la liga y a Bravos de Margarita.
Lo que más preocupa es el sistema de iluminación. Se dice -porque no hay información oficial- que las ocho torres de iluminación prácticamente se están cayendo y sus reflectores no funcionan. He ahí el grueso de la inversión que amerita el parque.
Vecinos cercanos al parque de pelota tomaron esta foto y denunciaron que los reflectores se han venido cayendo por el deterioro de la estructura de la torre.
Asimismo, los alrededores del estadio lucen desolados, pareciera que un candelero hubiese pasado por ahí arrasando con todo. Esa zona fue alguna vez reverdecida, pero la crisis de agua que aqueja a la isla la hizo retroceder.
Parece que el tiempo se detuvo en este sector y las imágenes denotan desolación. A lo lejos se observan como los reflectores de las torres se han caído o quien sabe si se los han ido robando, porque, se insiste en que no existe información oficial, ni hay reportaje periodístico de los medios locales al respecto.
El día 03 de diciembre de este mismo año, este usuario de la red social X posteó estas imágenes de lo que también padecen este y el resto de los estadios de pelota del país; eventos religiosos, políticos o conciertos que desafortunadamente causan daños estructurales.
El estadio de Guatamare en Margarita de dan uso para eventos Religiosos y los Bravos de Margarita jugando en Caracas … 🤦♂️🤦♂️ #LVBP @FanaticosBravos pic.twitter.com/OIwUu3epbK
— Abog. Abrahan Delgado C. (@CheCalderon) December 3, 2023
El parque ha servido de sede a eventos de masiva asistencia, como este concierto en el cual se ve el estadio a reventar, no solo en las tribunas, sino en el propio terreno de juego, pero, al parecer, lo recaudado por concepto de arrendamiento no redundó en beneficio para la propia instalación.
Anoche se presentó en el estadio Guatamare de Margarita el Grupo Barak, banda de música cristiana de República Dominicana
Más de 20 mil personas en el Tour Fuego y Poder que seguirá por varias ciudades de Venezuela 🇻🇪
Yo iré al de este sábado en Caracas. pic.twitter.com/BlBMRRnglj
— Raúl Zambrano Cabello (@RaulZambrano7) June 23, 2023
Hablar del resto de las instalaciones, es decir, estacionamiento, accesos, palcos de prensa, clubhouses, dogouts, salas sanitarias, cuarto de árbitros, enfermería, lavandería, bullpen y área de tribunas es casi imposible al no haber información ni oficial ni no oficial al respecto. Es una total incógnita, más allá de lo que aquí se puede mostrar de las condiciones de este parque de pelota.
Queda esperar que las iniciativas de recuperación de la obra se concreten. Para eso se requiere voluntad, integración, articulación. No puede dejársele solo la Gobernación de Nueva Esparta; Bravos debe establecer alianzas con la empresa privada, con los prestadores de servicios turísticos y con todo el que pueda para rehabilitar este parque y que los Bravos regresen para reiniciar la dura tarea de hacer fanaticada en Margarita, una tarea que ya venían desarrollándola con éxito.
NAM/Ernesto Ríos Blanco/Fotos y Videos: Cortesía
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