jueves 25 de abril de 2024

¡POR VENDER DESECHOS DE ALAMBRE! Preso injustamente por el CONAS propietario de una ferretería

Carlos Pérez, propietario de Ferretería Inperca, en San Carlos del Zulia, ha sacacado adelante su venta de negocio de artículos ferreteros y reparación de bobinas de diferentes tipos de motores, negocio que heredó de su padre ya fallecido, Caracciolo Pérez, quien lo inició en una habitación de su casa, ubicada en el sector Carlos Andrés Pérez.

Su mamá, sus hermanos, y hasta algunos vecinos trabajaban en la elaboración o reparación de bobinas para ventiladores, que su padre transportaba personalmente para distribuírlas en una ruta que llegó hasta la COL.

Al fallecer su papá, Carlitos como familiarmente se le conoce continuó la faena, y hoy en día dirige un negocio que ayuda a mantener a varios hermanos y familiares, como sólida fuente de empleo, y además contribuye con el mantenimiento de una iglesia cristiana.

Sin embargo, la maldad siempre acecha: Pérez y sus trabajadores van almacenando el alambre que es desechado de los motores que son reparados, y, al tener una cantidad considerable, si aparece un comprador se le vende. Para nadie es un secreto que acá en la localidad han existido desde hace mucho tiempo los populares «chatarreros», que van por las calles perifoneando que compran «hierro colao, baterías viejas, etc., etc.», y quien podría imaginar que por venderle los desechos a un personaje de éstos podría enfrentar sanciones y hasta prisión.

En esta ocasión el comprador lo contactó por vía telefónica (al parecer lo hizo con varios de quienes dirigen este tipo de talleres en la localidad), y al concretarse la venta, funcionarios del CONAS se aparecieron en el lugar llevándose detenidos y esposados, en una camioneta tipo pickup, bajo un torrencial aguacero a Pérez, su hermano y dos trabajadores, bajo el argumento de que estaban vendiendo material estratégico.

La situación presentada es totalmente injusta, y violatoria de todos los derechos de un ciudadano trajador, responsable y cumplidor de sus deberes ciudadanos, que no tiene ningún tipo de problemas o situaciones reñidas con la ley, la moral y las buenas costumbres.

NOTA: «Carlitos Pérez es mi sobrino, doy fe de todo lo que aquí expongo, porque lo conozco desde su nacimiento a él y a toda la familia, y hago un llamado a las autoridades militares, al gobernador del estado y quienes puedan tener la posibilidad de mediar para resolver esta difícil situación, así como también hago un llamado a mis compañeros, amigos y colegas comunicadores de la radio, redes sociales y otros medios para que se hagan eco de esta nota y nos ayuden a demostrar este atropello».

NAM/Dilmero Urdaneta