La opositora Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia anunció que asistirá a la reunión que sostendrá este miércoles un representante de la OEA y el Gobierno de Nicaragua, sobre los trabajos en materia electoral, como parte de los acuerdos para superar la crisis sociopolítica que vive el país.
La Alianza, que el martes había anticipado que no se sentaría con el Gobierno mientras este no cumpliera los acuerdos firmados en marzo para superar la crisis, explicó que su presencia en la reunión se debe a que fue la misma organización opositora la que solicitó dicho encuentro.
«Tomando en cuenta que esta presentación informativa fue solicitada por la Alianza Cívica a finales de marzo y que la Alianza Cívica emplazó al Gobierno a asistir en un comunicado del 11 de abril, informamos que esta mañana asistiremos a la misma», indicó el movimiento opositor.
En la víspera, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Nicaragua había informado que la reunión de este miércoles sería una «continuación» del memorándum de entendimiento suscrito el 28 de febrero pasado entre el Gobierno de Daniel Ortega y la OEA.
«Esta es una reunión meramente informativa. Las reformas hacia un sistema creíble y el adelanto de las elecciones son puntos de agenda fundamentales de la Alianza Cívica», insistió la oposición.
Esta mañana, el canciller Denis Moncada reiteró que el encuentro no está relacionado con las negociaciones entre el Gobierno y la Alianza desarrolladas del 27 de febrero al 3 de abril pasados, en las que no se alcanzaron las expectativas debido a la «falta de voluntad» del Ejecutivo, según la oposición.
En la reunión prevista para este miércoles, la OEA estará representada por el jefe de la Sección de Cooperación Técnica Electoral, del Departamento para la Cooperación y Observación Electoral (DECO) del organismo, Cristóbal Fernández.
El Gobierno de Ortega invitó a la Secretaría General de la OEA a participar en la mesa de negociaciones concluida a inicios del mes, la cual aceptó incorporarse como testigo y acompañante.
El Consejo Permanente de la OEA ha comenzado a aplicar la Carta Democrática Interamericana a Nicaragua, lo que podría culminar con su suspensión del organismo continental.
Nicaragua sufre una grave crisis que ha dejado 325 muertos desde abril de 2018, de acuerdo con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), aunque algunos grupos elevan a 568 las víctimas mortales, mientras que el Ejecutivo solo reconoce 199 y denuncia un intento de golpe de Estado.
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