Previamente, Nicolás Maduro respondió a un comunicado de la Unión Europea en el que se reclamaba contra la manipulación del Consejo Nacional Electoral (CNE) en Venezuela.
Además, en relación a las protestas que sacudieron las últimas semanas varias capitales europeas con la consigna #BlackLivesMatter, agregó: “Aquí hace tiempo derribamos las estatuas de los colonialistas asesinos. La Unión Europea que se vaya lejos al carrizo. Venezuela hará sus elecciones. No nos importa la Unión Europea”.
Al considerar la posición de ambas representaciones políticas internacionales como una intromisión, pues a su parecer es una “demostración de la soberbia y nostalgia colonialistas que aún perviven en las venas corporativas de las élites dominantes en el viejo continente”, así refiere el texto, donde además declinan la declaración de Josep Borrell, alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad.
Por lo que, en el documento digital publicado en la página oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores, “reitera que Venezuela es un país libre e independiente que no acepta, ni aceptará, groseras injerencias de ningún gobierno u organización internacional”.
Haciéndole, a su vez, un llamado a la UE para que recuperen el juicio ante la posición que han tomado en contra a los fines políticos del país liderado por el presidente Nicolás Maduro: “Por enésima oportunidad, Venezuela le hace un llamado sincero a la Unión Europea, a sus Estados miembros y sus instituciones, a recobrar la sindéresis, a respetar el Derecho Internacional, la soberanía del pueblo venezolano y a establecer relaciones constructivas de cooperación”.
Por su parte, el máximo representante de la cancillería venezolana, Jorge Arreaza dijo que el Grupo de Lima utiliza a Venezuela para intentar desviar la atención de lo que denomina, el diplomático, como un “catastrófico” manejo de la pandemia, tras pronunciarse sobre la designación del nuevo Consejo Nacional Electoral (CNE).
Jorge Arreaza, en su cuenta oficial Twitter cuestionó en forma adversa el comunicado difundido por el Grupo de Lima en desacuerdo con la designación del los nuevos rectores del CNE: “Estos gobiernos sumisamente cartelizados por Washington para agredir a Venezuela, denotan profunda ignorancia sobre el derecho constitucional venezolano y pretenden desviar la atención de su catastrófico manejo del Covid-19”, pues dice que “son epicentro de la pandemia por negligentes”.
