sábado 27 de abril de 2024

¡MACABRA REPRESIÓN! Así llora Birmania a sus muertos durante masacre del sábado (FOTOS SENSIBLES)

Cuando el mundo y la Iglesia conmemoran la “entrada de Jesucristo a Jerusalén” con el Domingo de las Palmas, un pequeño país se despierta en llanto, dolor, impotencia y desesperanza.

El pequeño país asiático, que limita con China, Bangladés, Tailandia y Laos, viene padeciendo una crisis sociopolítica sin precedentes y tras el golpe de Estado del 1 de febrero, ésta ha empeorado.

El pasado sábado, 27 de marzo, Birmania (Myanmar) padeció la peor represión, quizá de su historia, lo cual no ha detenido a los manifestantes que siguen en la calle contra los tomistas.

Entre 100 y 113 se ubica la cifra de muertos debido a los disparos que los castrenses y la policía efectuaron “a mansalva” señalaron medios internacionales, incluyendo mujeres y niños.

Al menos seis menores de entre 10 y 16 años murieron este sábado con perforaciones de bala en el cráneo y espalda.

Desde que se registró el golpe de Estado, se contabilizan 460 muertes en un ambiente realmente macabro y terrorífico por torturas diarias contra civiles desarmados, indica Myanmar Now.

En la localidad de Monywa, el diario Myanmar Now reportó el asesinato –con un balazo en la cabeza- de una enfermera de 21 años, mientras ésta atendía a un herido en el campo de batalla.

Incluso, denuncian que en Rangún, la mayor ciudad poblada del país, fuerzas de seguridad lanzarían una granada ocasionando muertes múltiples, dijo el grupo disidente Spring Revolution

Desalmados

Testigos informaron a Myanmar Now que fuerzas militares le dispararon a un hombre de 40 años y luego lo echaron en una barricada ardiendo en llamas y éste murió carbonizado.

Ese hecho macabro fue denunciado en la localidad de Aungmayaythazan, región Mandalay, cerca de la capital birmana.

“La ráfaga de fuego era intensa, no paraba. Era imposible salir a socorrer a los heridos, pasamos horas tirados en el suelo viendo como perforaban las paredes de nuestras casas” relató un testigo.

Denuncian además, el cierre de medios de comunicación por parte de la Junta Militar (golpista), persiguen periodistas, por lo que las coberturas se hacen de manera clandestina y a riesgo de vida.

Tras la masacre del sábado, los máximos jefes de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos y otros once países condenaron los hechos.

La mayor ironía es que la matanza fue ejecutada en paralelo con la celebración del Día de las Fuerzas Armadas Birmanas, con un desfile militar y una cena de gala entre ríos de sangre.

Esta condena contrasta con países como China, Rusia, India, Pakistán, Vietnam y Tailandia, que enviaron representantes a Birmania con motivo del Día de las Fuerzas Armadas.

NAM/Agencias