La crisis económica de Venezuela es un proceso de continua involución y regresión de todos los estadios y fases de la economía nacional hacia un nivel de reducción del Estado, del mercado y de la subsistencia socioeconómica misma de la población civil. Ese es el significado de lo que diversos analistas han catalogado como una compleja situación económica interna que ha devenido en un proceso salvaje y acelerado de dolarización de facto del país ante la elevada y exorbitante hiperinflación de la moneda nacional: el bolívar.
Y es que el director de Econométrica, Henkel García opinó que el uso del dólar es la respuesta al fenómeno de la hiperinflación.
“Los consumidores y empresarios para poder operar y hacer vida económica dentro del país, necesitan una referencia que sea relativamente estable en el tiempo”, así lo precisó durante una entrevista a la emisora Unión Radio, este lunes 14 de octubre.
“Esa referencia no la da la moneda local, el bolívar por el mismo fenómeno hiperinflacionario, sino una externa, de reserva como lo es el dólar de amplio uso desde décadas atrás por los venezolanos”, sostuvo García.
De tal forma que el bolívar ya no es una moneda de uso común debido a su inestabilidad y contaminación inflacionaria, pues actualmente se usa como variable del valor al cual realmente se anclan los precios y costos de la economía venezolana, que es el dólar estadounidense.
Igualemente dijo que este fenómeno se extenderá y no tiene reversión en el corto plazo “uno podría esperar que siga avanzando con ritmos mayores en algunos meses y quizás después con un ritmo menor”.
El consumo tendía a crecer exponencialmente en diciembre antes de la crisis por los tradicionales gastos navideños, pero actualmente ese consumo es bajo o casi nulo, en términos relativos, por lo cual la población que tiene acceso a bienes y servicios de alto costo lo hace en dólares, dada la amplia brecha socioeconómica que se ha configurado por la misma crisis del país.
Por otra parte destacó que hay que desmontar el mito de que en las zonas populares la gente no tiene acceso a la divisa estadounidense porque “desde hace tiempo utilizan el dólar como medio de intercambio y quizás con mayor penetración que en distintas zonas de clases media”.
Esta afirmación da cuenta de que el dólar ya forma parte de una amplia masa monetaria que circula libremente en todo el país, sobre todo en la zona occidental y fronteriza, por el enorme flujo de moneda norteamericana que ha aumentado con los envíos de remesas, las importaciones de negocios de víveres, las ventas de bienes como casas y carros en dólares.
Ricardo Serrano
