Cinco tipos de medicamentos inmunosupresores, fármacos que requieren los pacientes trasplantados para evitar que se produzca un rechazo de órgano, están disponibles en las farmacias de alto costo del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (Ivss).
Así lo informó a Efecto Cocuyo el director de la Coalición de Organizaciones por el Derecho a la Salud y la Vida (Codevida), Francisco Valencia, quien detalló que la distribución del tratamiento inició esta semana.
Los inmunosupresores disponibles en las farmacias del Ivss son: micofenolato sódico, micofenolato mofetilo, tacrolimus, ciclosporina y azatioprina. Pese a la llegada de estos medicamentos, aún escasean otros cuatro fármacos de este tipo. En el listado no se contempla la Prednisona, uno de los más solicitados en el esquema de tratamiento de los pacientes.
Según una consulta realizada por Codevida a pacientes trasplantados de distintas entidades del país, los medicamentos aún no habían sido despachados en las farmacias de alto costo de Táchira, Monagas y Sucre para este martes 28 de agosto.
Táchira es precisamente el estado en el que Codevida registra mayor cantidad de rechazos de órganos, debido a la ausencia de tratamiento oportuno, con un total de 12 casos de pérdidas de injerto.
Balance de Codevida
Hasta la fecha, la ONG contabiliza 12 pacientes trasplantados fallecidos por falta de medicamentos únicamente en lo que va de 2018. Para ese mismo período, Codevida también registró 96 rechazos de órganos.
Valencia también detalló que la organización no ha recibido denuncias de pacientes a los que se les solicitara el carnet de la patria para retirar inmunosupresores en las farmacias de alto costo.
“No hemos recibido ningúna denuncia de persona con condición de salud crónica a la que le hayan pedido el carnet de la patria para retirar tratamientos en Ivss hasta el momento”, afirmó Valencia.
A finales de julio de este año, pacientes trasplantados denunciaron la distribución irregular de medicamentos inmunosupresores en las farmacias de alto costo. Alertaron que los fármacos fueron entregados por el Seguro Social a “cuentagotas” y durante pocos días, por lo que la mayoría de las personas con esta condición no pudo acceder a ellos.
NAM/Efecto Cocuyo
