A poco más de un mes de la desaparición de Gabriel Cruz mejor conocido como ‘pescaito’, el menor de 8 años de edad fue asesinado por la pareja sentimental de su padre pero Ana Julia Quezada no confesó de inmediato su asesinato, pues incluso intentó inculpar a una expareja de ella.
Tanto Patricia Ramírez y Ángel Cruz, padres de Gabrielito buscaron al niño y este caso de España no solo conmovió a los habitantes de aquel país sino que dio la vuelta al mundo tras enterarse de que el niño no solo estaba desaparecido sino que había sido asesinado.
Cabe señalar que el menor fue reportado como desaparecido el pasado 27 de febrero en Las Hortichuelas, en Níjar (Almería), y 5 horas después del reporte las fuerzas de seguridad comenzaron la búsqueda del menor hasta que Ana Julia se confesó como la asesina de pescaito.
Después de haber recuperado el cuerpo de Gabrielito, las autoridades comentaron que los primeros indicios de la investigación indicaban que el menor había muerto el mismo día de su desaparición.
Este día surgió nueva información sobre el caso y de acuerdo con el informe de la autopsia el cual ya está en el poder del juez de instrucción número 5 de Amería, Rafael Soriano, refiere que Gabriel Cruz falleció de muerte violenta en la barriada de Las Hortichuelas en Níjar, y se le privó de la vida entre una o dos horas después de que ‘pescadito’ comió.
Para llegar a esa conclusión se recogieron muestras del contenido estomacal del menor, las cuales fueron enviadas al Instituto Nacional de Toxicología en Sevilla, España.
El magistrado Rafael Soriano sostuvo que la participación de Quezada en el caso es incuestionable pues incluso mencionó que como parte de ese «macabro plan criminal», se intentó dotar de una coartada haciendo labores de pintura en la finca de Rodalquilar, en Níjar para despistar a las autoridades.
El juez mencionó que Quezada enterró el cuerpo sin vida de Gabriel, en un hoyo que previamente la mujer había realizado para que nadie pudiera encontrar al menor.
«Las pruebas revelan, presuntamente, una falta de sentimientos y humanidad que ella misma ha calificado, que, de ser ciertas, serían de pura crueldad», mencionó la autoridad.
El juez ha solicitado la presencia de otros familiares entre ellos los padres del menor y la abuela paterna para que puedan comparecer en la sede judicial en calidad de testigos, el pasado 22 de marzo los padres de Gabrielito comparecieron durante dos horas antes el magistrado.
Las autoridades emitieron un comunicado en donde se señaló que el caso de Gabrielito era uno de los más duros. El juez instructor ha sido el encargado de tomar la declaración por separado a los testigos para conocer más detalles sobre el caso y al mismo tiempo averiguar sobre el comportamiento de Quezada con los integrantes de la familia durante los 13 días en los que se mantuvo la búsqueda del menor.
Y es que de acuerdo con las indagatorias, Quezada la autora confesa de la muerte manipuló su actuar y a decir del juez realizó lo siguiente:
«Dio una falsa apariencia de preocupación por la desaparición y suerte del niño… mantuvo el engaño, aumentándolo hasta el punto de colocar ella misma una camiseta del menor para desviar la investigación e inculpar a alguien más”, indicó.
La abuela paterna del menor, también acudió a comparecer ante las autoridades solo que ella lo hizo por media hora ya que para la abuela de Gabrielito fue un hecho muy doloroso porque el menor se encontraba con ella antes de su desaparición.
Finalmente señalaron que las pruebas recopiladas por los agentes de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil señalan que lo que se hizo con Gabrielito fue un acto de crueldad.
NAM/Soy Carmin
