viernes 26 de abril de 2024

¡A UN AÑO QUE COMENZÓ TODO! Conflicto Rusia-Ucrania: Perspectivas de una Tercera Guerra Mundial en Puertas (1)

El conflicto en términos de acción directa comenzó en 2014 para la audiencia internacional. Pero para Ucrania el conflicto comenzó en 2013. Rusia quería a Ucrania como miembro de una organización de cooperación económica con ellos, pero el presidente Víktor Yanukóvich inicialmente quería a Ucrania en un acuerdo de asociación con la Unión Europea.

Sin embargo, no se puede mirar este conflicto a partir de este punto medio, porque resulta que Ucrania pertenece o perteneció al llamado “bloque soviético” y fue parte de aquel enorme país –junto con Rusia- llamado Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS).

Para encontrar el real génesis de este conflicto, desde una perspectiva pro occidental y de un modo sencillo y entendible, hemos tomado una cronología publicada por el portal The Conversation https://theconversation.com/ que lo explica desde la raíz. De allí se nutre parte de este reportaje.

NACIMIENTO DE LA URSS

Rusia es la nación más grande de la tierra, un verdadero continente. Su territorio se extiende desde el centro de Europa hasta el extremo de Asia. Durante buena parte del siglo XX, Rusia existió dentro de un estado aún más grande que se llamó la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS). Ese estado nació cuando, después de la Revolución de 1917, el Imperio de los zares de Rusia se deshizo y un número importante de países surgieron de sus cenizas: Polonia, Estonia, Letonia o Lituania, pero también otros como Ucrania y Georgia y, por supuesto, la República de Rusia.

Rusia se convirtió en el primer Estado socialista del mundo. Estaba dirigida por los bolcheviques, un partido antiliberal y antidemocrático que, si bien inició algunas leyes progresistas e innovadoras, controlaba la sociedad con una dictadura marcada por la violencia y la imposición. Los bolcheviques querían crear una sociedad igualitaria, pero para ello suprimieron las libertades ciudadanas y los derechos civiles. Destruyeron así la primera democracia parlamentaria que se había creado en Rusia.

UCRANIA Y SU HISTORIA

En la Edad Media había existido un primer estado ucraniano, la Rus de Kiev, que también se considera el inicio de Rusia. Cuando, en el siglo XVIII, Rusia se convirtió en un imperio, casi toda Ucrania quedó en sus manos. La cultura y el idioma ucraniano fueron menospreciados y perseguidos durante muchos años. A la lengua ucraniana se la consideraba mero dialecto de la rusa, la cultura propia se veía como campesina, pobre, poco sofisticada. Las élites culturales ucranianas lucharon por una autonomía en el imperio y, cuando este se hundió tras la revolución, intentaron crear un Estado independiente.

La reconquista del país por los bolcheviques tuvo primero una cara amable: se permitió el florecimiento de la cultura y la lengua. Pero luego la política se hizo muy restrictiva. Las políticas de los bolcheviques llevaron al país a una gran hambruna, llamada Holodomor, en la que murieron millones de ucranianos.

Durante la Segunda Guerra Mundial, los nazis invadieron la URSS y provocaron una enorme destrucción en Ucrania, asesinando a millones de personas, incluyendo a casi toda la población judía. Ucrania fue uno de los escenarios del Holocausto. Una parte de los ucranianos colaboró con los nazis para lograr su independencia, cometiendo muchos crímenes. Otra parte luchó contra los invasores nazis y consiguió expulsarlos del país, junto con el ejército de la URSS.

Con el tiempo, Ucrania dentro de la URSS se recuperó y llegó a ser uno de los territorios más importantes de la Unión. Tenía una gran industria y era considerada como el granero del país: producía una gran cantidad de trigo y pan. Cuando en 1991, tras muchas tensiones, la URSS se disolvió, los países que la componían se hicieron independientes. Ucrania también votó, en un referéndum masivo, a favor de su consolidación como Estado propio.

Cuando la Rusia bolchevique se consolidó, comenzaron a atacar a los países que la rodeaban. En unos pocos años, Rusia invadió y recuperó muchos de los territorios que había perdido y los incorporó a la URSS. Uno de ellos fue Ucrania, un territorio muy amplio del que una parte quedó en manos de Polonia.

LO QUE SUCEDE HOY, Perspectiva Occidental

En este siglo XXI, el camino para la paz y la prosperidad estaba aún lejos. Ucrania es un país muy grande, donde casi la mitad de la población tiene como lengua materna el ruso y se sienten vinculados a Rusia. Había mucha indecisión acerca del camino que tenía que tomar Ucrania: ir hacia la Unión Europea y occidentalizarse o mantenerse bajo la influencia de Rusia. Muchos ucranianos pensaban que era posible tener ambas cosas.

Aprovechando una crisis política en Ucrania en 2014, con manifestaciones y violencia callejera, Vladimir Putin ordenó a sus tropas invadir de forma anónima (sin uniforme) la península de Crimea, que formaba parte de Ucrania. También impulsó levantamientos en dos provincias fronterizas con Rusia (Donetsk y Lugansk), que convirtieron esa parte del país en una zona de guerra durante muchos años. Los intentos de acuerdo en la ciudad bielorrusa de Minsk no sirvieron de mucho.

Durante años la tensión entre los dos países fue creciendo. Rusia acusó al gobierno ucraniano de ser ilegal y de apoyarse en la ultraderecha. Hay que recordar que, paradójicamente, es Putin quien se ha convertido en un modelo para la ultraderecha en Europa y el mundo. Con el tiempo, Rusia incrementó la presión y llevó a sus ejércitos a la frontera con Ucrania. Hasta este 24 de febrero, cuando se ha decidido a lanzar sus tropas desde diversos puntos de la frontera, bombardeando ciudades, aeropuertos y vías de comunicación.

¿RUSIA SE ENTROMETE EN UCRANIA?

Una visión apunta a que Vladimir Putin no ha aceptado el camino de independencia y soberanía de Ucrania, porque para muchos rusos, Ucrania sigue siendo un territorio muy ligado a ellos, algo que también piensan muchos ucranianos. Pero los rusos, también consideran a Ucrania un “hermano menor”. No aceptan que los ucranianos puedan dirigir sus propios destinos y decidir lo que quieren.

Quizá esa sea una posición simplista del conflicto. Resulta que por Ucrania o, mejor dicho, por debajo del país que hoy es Ucrania y que antes fue la URSS, pasa una serie de estructuras de amplia capacidad instalada energética que pertenece a Rusia, pero que parte de ella se sitúa o pasa por Ucrania. Gasoductos, oleoductos y otras instalaciones que se fueron construyendo en el hoy territorio ucraniano cuando Rusia y Ucrania fueron los mismos bajo el nombre de la URSS. Eh ahí una clave muy importante para entender el conflicto.

LA JUSTIFICACIÓN DE PUTIN

La noche del miércoles en el horario de América Latina, o la madrugada de Europa, Vladimir Putin, en uno de sus últimos discursos a la nación, dijo que las repúblicas independientes que acababa de reconocer en el Donbass pidieron ayuda. Por lo tanto, la federación rusa llevará a cabo una operación militar especial con el objetivo de lograr la desmilitarización y “desnazificación” de Ucrania: “llevando ante la justicia a quienes cometieron múltiples crímenes sangrientos contra civiles, incluidos ciudadanos rusos”.

¿Cuáles son las repúblicas independientes recientemente reconocidas en Donbas? ¿Y por qué Putin las está utilizando como pretexto para llevar a cabo una operación militar completa en Ucrania?

Para tratar de entender las palabras y las intenciones de Putin, debemos proporcionar un contexto histórico. Para empezar, la República Popular de Donetsk y la República Popular de Luhansk, recientemente reconocidas independientes por parte de Putin, son dos territorios de la región de Donbas (sur est Ucrania) que han sido formalmente parte de Ucrania desde su independencia.

Sin embargo, debido a la gran concentración de población que habla ruso (hasta el 92 %) y los recientes acontecimientos políticos de Ucrania, la región ha estado en guerra durante los últimos 8 años, y cuenta con un número estimado de muertos de más de 14.000 personas.

De ahí se agarró el presidente Vladímir Putin para concretar algo que venía fraguando desde hace años, muchos años, entre otras razones, como se ha dicho y se profundizará más adelante, son geopolíticas, geoestratégicas y geoeconómicas y más aún hegemónicas.

PERSPECTIVAS DE ANÁLISIS

La internacionalista Elsa Cardozo, entrecomilló lo “sorpresivo” de la concreción en sí de la guerra: “A pesar de que ésta era una guerra que ya estaba anunciada, que venía poco a poco tomando fuerzas, impacta el carácter sorpresivo –entre comillas- de cómo al final se lleva a efecto y parte además de una campaña de expansión territorial de Rusia que comienza a evidenciarse cuando el presidente Vladímir Putin desconoce la soberanía de Georgia en 2008 y luego en 2014 pasó con Crimea; y tras iniciar la campaña en la región del Donbass inicia el despliegue militar que termina en lo que hoy tenemos”.

La experta lo explica como una “movida geopolítica de tal magnitud que preocupa y asusta, porque esto mueve las fibras en toda la política mundial, tiene consecuencias en todos los ámbitos y pone en riesgo la situación de seguridad del mundo entero, que promete una fuerte militarización de la política internacional, principalmente en Europa. Me trae al recuerdo lo que se vivió en el período previo a la caída del muro de Berlín”.

Cardozo: “No puede olvidarse la importancia de la coherencia estratégica”

La especialista teme un quebrantamiento de la seguridad del mundo y en ese contexto reflexiona sobre “la necesidad de que Europa, Estados Unidos y la misma Rusia no olviden la importancia de la coherencia estratégica, la importancia de las respuestas a tiempo, pero vemos que, luego de la anexión de Ucrania por Rusia, hubo mucha contradicción en visiones y actuaciones que irrespetaron esa coherencia indispensable frente a un adversario, en este caso frente a Rusia”.

Para Cardozo, las decisiones de Occidente y la Unión Europea no son fáciles de tomar si se piensa en la escalada que eso tendría y respecto a las sanciones, afirma que no solo tendrá consecuencias en Rusia sino en el mundo entero.

Un asunto más geoestratégico

Para el Doctor Alberto Hutschenreuter, Doctor (summa cum Laude) en Relaciones Internacionales. Profesor en el Instituto del Servicio Exterior de la Nación (República de Argentina). Posgrado en Control y Gestión de Políticas Públicas. Profesor Titular de Geopolítica en la Escuela Superior de Guerra Aérea, el tema de Moscú y Kiev versa en la condición geopolítica y más allá geográfica que significa para Rusia el hacerse de Ucrania.

Hutschenreuter, afirma que “para Rusia, Ucrania implica su condición Euroasiática, sin Ucrania, Rusia solo sería un país asiático. En Rusia hay un enfoque relativo con ambiciones de Occidente en relación con limitar ese crecimiento de Rusia”.

El experto señala, en relación con las críticas de una “respuesta tardía de la OTÁN” que en realidad “ésta no puede aplicar el artículo de defensa colectiva que reza que, si atacan a un miembro, atacan a toda la OTÁN, porque Ucrania no integra la OTÁN, lo ha pretendido, pero eso no se ha gestado, por lo tanto, la OTÁN no puede asumir una defensa tal como se está pretendiendo que suceda en Ucrania”.

“Pero si pudiera apelar al artículo 51 –de la Carta de Naciones Unidas- donde se pueden tomar medidas si, en un conflicto entre países, ponen en riesgo la seguridad de algún país miembro de Naciones Unidas, pero estaríamos frente a una escalada muy sensible, que, por ahora no se contempla. Occidente, hasta ahora, plantea medidas para tratar de presionar con la economía, agotando otros recursos menos impactantes como una ocupación”, afirma Hutschenreuter.

De la Segunda Guerra Mundial para acá

Sostiene el experto en inteligencia militar, ex miembro del Servicio de Inteligencia Español, quien además labora en HSI Intelligence España, Jorge Gómez que “se está centrando una discusión entre dos poderes en territorio que, ni es de uno ni es de otro; Estados Unidos y Rusia plantean sus viejas disputas en Ucrania, un territorio que es europeo y se corre el riesgo de que la vieja Europa se convierta en un campo de batalla en las discusiones de otros”.

Gómez coincide con Elsa Cardozo en cuanto a saber ser “prudentes” y entender que “de la Segunda Guerra Mundial salió un orden que nos ha mantenido en paz por muchos años y lo contrario nos acerca más al abismo”.

La ucraniana, Inna Kovalska, experta en Gestión y Apoyo Operativo, quien también trabaja para HSI Intelligence, radicada en España, respondió a Román Lozinski: “En la guerra no hay ganadores, todos salen perdiendo. Concuerdo con Jorge (Gómez) en que estamos viviendo en pleno siglo XXI, detrás de nuestras espaldas ya tenemos dos guerras mundiales y no hemos aprendido nada, hemos pasado por la pandemia, conflictos entre Palestina e Israel y seguimos; cada día tenemos una nueva noticia de conflictos de esta naturaleza y nos hemos convertido en analistas, analizamos mucho, muchas personas se convierten en analistas cuando en verdad no lo son”.

Una aleccionadora postura es la de esta ucraniana, sacudida por este conflicto en su país, asume cuando interpreta, ante la convocatoria en España, país donde reside, de una marcha en rechazo a la OTÁN y en apoyo a Putin que “creo que cada uno puede expresar su opinión como quiere, somos libres en expresar nuestra opinión, el asunto está en la toma de decisiones y en este sentido, las decisiones se tienen que tomar en relación con la posición que un país soberano tenga, no pueden tomarla otros países sino ese país; si Ucrania es un país soberano y libre de decidir si integra la Unión Europea o la OTÁN, es una decisión de Ucrania y no de otros países”.

Doctor Félix Gerardo Arellano: “Lo que viene es impredecible”

El Internacionalista, Doctor en Ciencias Políticas, docente de postgrado en la Universidad Metropolitana de Caracas, profesor de la Escuela de Estudios Internacionales de la UCV, Doctor Félix Gerardo Arellano, manifiesta con mucha preocupación, que “no haberle puesto límites a las acciones de Vladímir Putin y haber permitido este desenlace le trae al mundo la más grande incertidumbre de cómo irá a terminar esto”.

Arellano señala que “es la amenaza contra los 15 estados independientes de lo que era la vieja URSS; Polonia, Rumania, Estonia, Letonia, Lituania, Bulgaria, todos tienen que estar muy preocupados, porque se tomó a Crimea en 2014 y hubo indiferencia; y se está tomando a Ucrania ante los ojos de la humanidad y su conjunto y no se procedió con fuerza; había que negociar la paz, pero, Occidente tenía que defender a Ucrania, ahora tenemos un Putin empoderado y nadie le pone límites”.

Doctor Félix Gerardo Arellano: “Lo que viene es una masacre en Ucrania”

Ante las posibles respuestas de la OTÁN o de la Unión Europa y del mismo Estados Unidos, Arellano fue muy parco: “Occidente ya respondió y dijo que no quiere guerra, por lo tanto, lo que viene es una masacre en Ucrania, aun cuando el ministro de Defensa ruso diga lo que diga, es imposible creerle, porque no hay una correspondencia entre lo que dice e informa y lo que hacen”.

Arellano sostiene que, ante la incredibilidad recíproca desde la OTÁN, la U.E. y Europa hacia Putin y desde Putin hacia la OTÁN, la U.E. y Europa, los países vecinos deben prepararse: “A la OTÁN le correspondía mover tanques en favor de Ucrania, negociar la paz, pero mover los tanques para proteger a Ucrania, y ya es algo que deben estar destacando a nivel internacional, Rusia está tomando dos repúblicas simultáneamente; Ucrania y Bielorusia, porque esta última ya está tomada, está ocupada militarmente con la excusa de que iba apoyar la acción frente a Ucrania, pero esos tanques se quedan en Bielorusia”.

Economista Leonardo Buniak: “Europa es una suerte de rehén energético de la Federación Rusa”

Para el economista, experto en economía internacional, bancas, finanzas y calificador de riesgos, Leonardo Buinak, además de alertar el predecible impacto económico en la caída de las bolsas de valores y en el abrupto incremento en los precios del barril de crudo, que pueden oscilar entre los 120 y los 150 dólares por barril, destaca algo más grave aún: “Europa es una suerte de rehén energético de la Federación Rusa”.

Buniak afirma que “Europa depende energéticamente de Rusia y, si bien Ucrania no es productor de petróleo ni de una importante cantidad de gas que pueda exportar, sin embargo, Ucrania es nada menos que el principal corredor energético que conecta a Rusia con Europa; casi 40% de los corredores, de los tubos de hierro, oleoductos, gasoductos que alimentan a Europa Central pasan por Ucrania, de ahí la decisión de Vladímir Putin de construir el famoso Nord Stream 2, una enorme tubería que pasa por el mar Báltico y de ahí es donde parte el hecho de que Europa es una suerte de rehén energético de la Federación Rusa, donde más o menos en más de un 42% hay una dependencia de Europa de la Rusia de Putin, pero si lo medimos por países, vemos que Austria depende del gas en un 100% de Rusia; Alemania, cuarta economía del mundo y número uno de Europa depende en un 60% del gas de Rusia y no le quedó otro remedio que aplicar las sanciones económicas que como primeras acciones de presión está tomando la OTÁN”.

Otras consecuencias de este conflicto es el disparo en los precios del combustible, que en todo el mundo se sentirá el efecto, fundamentalmente en aquellos países no petroleros, está la crisis mundial de contenedores, la inflación global a escalas importantes, la posibilidad de que Rusia cierre el gas a Europa, la crisis de suministros y sumarle a todo esto dos años de pandemia y contando para una economía que no estaba normal.

Economista Leonardo Buniak: “Putin se preparó muy bien para esto, porque él sabía lo que venía”

“Putin –sostiene Buniak- se ha preparado desde hace ya varios años para este escenario. El Banco Central de Rusia ya acumula en este momento 600 mil millones de dólares en reservas internacionales, preparándose para este conflicto, Putin sabía que le vendrían sanciones económicas, financieras y energéticas. Putin ha reducido el peso de la deuda pública dentro del PIB, ha acumulado importante cantidad de reservas internacionales a expensas del bienestar de la población, precisamente para afrontar estos efectos y es increíble las maniobras de Vladímir Putin con sus grandes ambiciones expansionistas, porque en él hay una especie de nostalgia postsoviética, eso de intentar reestablecer la vieja frontera y el poder de influencia de la antigua Unión Soviética es una demostración muy clara”.

¿Y los países productores de petróleo como Venezuela, ganan o pierden?

Para Buniak “este es un mercado de ganadores y perdedores, pierde la economía mundial, se afectan los países consumidores, pero los países productores entran en fiesta, de hecho, en los últimos meses Estados Unidos ha incrementado la producción de petróleo y gas y de hecho exporta más de lo que importa, porque las condiciones de precio le han permitido producir un crudo no convencional y muy costoso de su extracción”.

Sostiene Buniak que “para Venezuela, indudablemente, representa una gran ventaja tener un incremento en el precio del crudo tan importante, con la salvedad de que lo único malo es que las oportunidades son tales siempre y cuando puedan ser aprovechadas y la única manera de que tú puedas aprovecharla es que tengas un potencial de producción que aproveche esta coyuntura, porque los ingresos petroleros es igual a precios por cantidades y si las cantidades no son suficientemente buenas no se va a generar el efecto deseado”.

“En conclusión –insiste Buniak- Ucrania va seguir siendo atacada por los cuatro puntos cardinales; por el este desde la región del Donbass, por el norte desde Bielorusia, por el sur desde Crimea y el mar Negro y por el oeste a través de la República Moldava Pridnestoviana de Transnistria, que es una especie de estado de facto que nació bajo las faldas del Kremlin, en consecuencia, esto estaba preparado, el objetivo es claro, sacar a Ucrania de la órbita europea y de la OTÁN y está en línea con las ambiciones expansionistas de Rusia, por esa nostalgia postsoviética de Putin de intentar reestablecer las viejas fronteras de la Unión Soviética”.

LOS ALIADOS DE RUSIA

¿China?

La lista de aliados de Rusia, por tener a Estados Unidos como enemigo en común, empieza con China, país al que Rusia ha pedido ahora liderar la mediación con Ucrania para alcanzar un alto al fuego tras el inicio de las negociaciones que se dieron en la frontera ucranio-bielorrusa este lunes. «No olvidemos jamás quién es la auténtica amenaza para el mundo», han defendido recientemente desde la Embajada china en Rusia apuntando directamente a Estados Unidos, «quien ha provocado todo esto», según la postura que defiende China.

Cuba

el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba manifestó en un comunicado que el Gobierno de Estados Unidos lleva semanas amenazando a Rusia y «manipulando a la comunidad internacional sobre los peligros de una inminente invasión masiva a Ucrania», de acuerdo con lo que recogía el Ejecutivo en dicho documento, que se puede consultar a través del sitio web oficial del Minrex.

A pesar de aliarse con Rusia en el conflicto, la Cancillería de Cuba abogaba por una solución «diplomática», a través del diálogo «constructivo y respetuoso», para salvaguardar la paz.

Venezuela

Asimismo, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, que agradeció a través de su cuenta en la red social Twitter el apoyo de China, Cuba y Rusia en la inmunización contra el covid-19 de la población venezolana, se ha aliado con el presidente de Putin en contra de Estados Unidos y ha mostrado su apoyo al presidente Putin y a su pueblo.

«Desde Venezuela repudiamos los planes perversos que pretenden rodear militar y estratégicamente a Rusia», expresaba Maduro en internet. «Estamos seguros de que Rusia saldrá unida y victoriosa de esta batalla, con la admiración de los pueblos valientes del mundo», añadía.

 «Hemos estado observando atentos los acontecimientos en Rusia y Ucrania; observando, no desde ahora, la evolución del proceso donde el imperio norteamericano y la OTAN pretenden por la vía militar acabar con Rusia, detenerla y acabar con este mundo multipolar que ya es una realidad».

Nicaragua

El presidente Daniel Ortega también ha expresado “todo su respaldo” al pueblo y al gobierno ruso, argumentando que, ésta es una guerra orquestada desde los Estados Unidos y apoyada por la OTÁN con el propósito de aniquilar a Rusia en la lucha hegemónica mundial.

OTROS IMPACTOS DE LA GUERRA

En el ámbito del arte, el espectáculo y los eventos

¿La falta de compatibilidad entre los desfiles de moda y la situación de Ucrania es algo que debe abordarse? Con esta pregunta, acompañada por varios montajes de imágenes que enfrentan la realidad que se vive en la invasión con los desfiles de la Semana de la Moda en Milán, Giancarlo Giammetti, el cofundador de la firma “Valentino”, ponía palabras su red social Instagram al sentir general en la Fashion Week italiana.

Un gesto solemne que tuvo lugar un día después de la clausura de la Semana de la Moda de Milán, unas jornadas donde ningún diseñador se pronunció, a excepción de Armani, sobre el conflicto de Ucrania y Rusia. Una actitud inesperada que contrastaba con las manifestaciones que se organizaban a las afueras de los desfiles.

Armani fue el único diseñador de la Semana de la Moda Milán en reaccionar ante la invasión, presentando su colección en completo silencio “Buscaba la forma de comunicar que aquí no estamos de celebración, porque lo que está pasando allí fuera me preocupa mucho” aseguró el diseñador.

Cultura consternada

La Federación de la Alta Costura y la Moda de París, encargada de organizar la Semana de la Moda en la capital francesa, se solidarizó con el terror que vive el pueblo ucraniano y pidió a todos los invitados que acudieran a los desfiles con “la solemnidad que requieren estas horas oscuras”.

«La guerra ha estallado brutalmente en Europa, sumiendo al pueblo ucraniano en el miedo y el dolor. La creación se basa en el principio de la libertad, sean cuales sean las circunstancias. Y el papel de la moda es contribuir a la emancipación individual y colectiva en nuestras sociedades», señaló en un comunicado el presidente de la Federación de la alta Costura y la moda de París, Ralph Toledano.

¿Sordera?

Vena Brykalin, director de moda de Vogue Ucrania, quien viajó a la capital italiana sin imaginar que poco después su tierra sería atacada, confesó su sentir el pasado domingo: «Las semanas de la moda han sido históricamente muy rápidas a la hora de reaccionar ante distintos eventos que les han afectado. Pero ninguna gran marca -excepto Armani- ha manifestado su apoyo hasta el momento».

Después, en declaraciones al Evening Standard añadió: «No creo que debamos esperar que el mundo deje de girar. Ni que los diseñadores que han invertido seis meses de trabajo y mucho dinero en una colección cancelen. Creo, y puede que me critiquen por ello, que el espectáculo debe continuar. Pero sí pienso que esta industria está realmente sorda y Milán lo ha demostrado esta semana». Brykalin no sabe ni cuándo ni cómo podrá regresar a casa tras cubrir la fashion week o si, por el hecho de ser hombre, será llamado a luchar.

Muy afectada

Una situación similar vive la modelo Kateryna Zub, que hace una semana voló a la ciudad transalpina desde Kharkiv, la antigua capital de Ucrania, donde permanecen sus padres, con la intención de presentarse a los castings de los distintos desfiles.

Sin embargo, el enterarse del estallido de la guerra se sintió incapaz de seguir trabajando. En declaraciones al Standard ha dicho que cuando llegó a la ciudad «estaba destrozada, lloraba tanto que no podía hacer las audiciones. Es horrible, es una pesadilla. No puedo creer que lo que está pasando en mi país. Me sorprende que la gente en Milán ignorara la situación en Ucrania. Seguían hablando de Prada y Gucci como si nada», contó la joven, que en otras ediciones ha desfilado para firmas como Dolce & Gabbana, Giorgio Armani o Bottega Veneta.

“La industria de la moda siempre está al tanto de lo que ocurre en el planeta. Tiene una voz poderosa que permite pronunciarse, influir e impulsar cambios reales. En estos tiempos difíciles y oscuros para Ucrania y la comunidad mundial, os pedimos que utilicéis vuestras voces ahora para apoyar a Ucrania, proteger a la humanidad y ayudarnos a detener la guerra”, detallaba el comunicado firmado por Marusya Koval, responsable de marketing de los grandes almacenes ubicados desde 1939 en la mayor arteria comercial de Kiev.

Así se espera que otras industrias, como la música, el cine, el teatro y demás áreas vinculadas con el espectáculo y el entretenimiento se pronuncien y se expresen respecto a esta tragedia.

EL DEPORTE REACCIONA MUCHO MÁS

El mundo quedó paralizado cuando las fuerzas de Rusia invadieron Ucrania. Frente a este escenario, el deporte no quedó ajeno a las situaciones traumáticas que se generaron por el ataque que lanzó Vladimir Putin.

Así pues, mientras las tropas locales resisten los embates de Rusia, varias entidades han tomado drásticas decisiones que afectan al presente y el futuro próximo del deporte ruso y de Bielorrusia, la otra nación que le dio su apoyo a Putin en el comienzo de las hostilidades.

Judo

La primera organización en reaccionar fue la Federación Internacional de Judo retira a Vladimir Putin como Presidente Honorario.

En un comunicado, la federación citó «el conflicto bélico en Ucrania» para suspender el estatus de Putin como presidente honorario.

Sanciones FIFA

De las sanciones más significativas que se llevaron a cabo en las últimas horas se destaca la suspensión por parte de la FIFA de las selecciones de fútbol rusa, tanto masculina como femenina.

De esta manera, el combinado masculino no podrá participar del próximo Mundial de Qatar 2022. A pesar que no estaba clasificado para el máximo evento de la disciplina, el conjunto que dirige Valeri Karpin no jugará la primera instancia del repechaje ante Polonia por la llave 2 que determinará un seleccionado a la Copa del Mundo.

En el mismo cuadro también están los equipos de Suecia y República Checa, quienes fueron los primeros en solicitarle a la FIFA no jugar en territorio ruso y luego pedir la exclusión de su posible rival.

Siguiendo con el fútbol, tras la suspensión de los equipos rusos en certámenes internacionales por parte de la UEFA, el Spartak de Moscú quedó descalificado de la Europa League: se hallaba en octavos de final, instancia en la que se iba a medir ante el RB Leipzig de Alemania.

Automovilismo reacciona

En otro de los deportes más populares del mundo como el automovilismo, hay un caso en particular: Nikita Mazepin es el único piloto ruso en la Fórmula 1. Y, aunque estaba en duda su continuidad, la FIA permitirá que compita en el equipo Haas, pero no bajo su bandera.

El Tenis alza su voz

En otro ámbito, tenistas como Daniil Medvedev -flamante número 1 del mundo ATP- o Andrey Rublev, se expresaron en contra de la invasión a Ucrania. El nuevo líder del listado estrenará su condición sin poder presentarse bajo su bandera, luego de la decisión tomada por la ATP. Lo mismo sucede con la WTA del ranking femenino que tiene a la bielorrusa Aryna Sabalenka como una de las mejores de la actualidad.

Sin bandera ni himno ruso en la Natación

El nadador Evgeny Rylov, especialista en espalda y que cosechó dos medallas doradas en Tokio 2020, participará del campeonato del mundo de natación en Budapest (junio) y otro torneo europeo en agosto, en Roma. Hay que destacar que la federación del deporte (FINA) permite que los nadadores rusos puedan competir como neutrales, sin bandera, himno ni ningún símbolo que los identifique con su país.

En ese mismo sentido están otros deportistas de las diferentes disciplinas de la gimnasia, el patinaje o el atletismo. Son muchos los atletas que sufrirán en un contexto mundial que, por ahora, se mantiene atento al conflicto que sucede en territorio ucraniano.

Deportistas ucranianos se expresan

Boxeadores

Vitali Klitschko, excampeón del mundo de boxeo, ha cambiado su chaqueta de alcalde de Kiev por un uniforme, para organizar la defensa de su ciudad y de sus 3 millones de habitantes.

«Me entreno todo el tiempo, hago formaciones como antiguo oficial y jefe de la defensa territorial, sé tirar con casi todas las armas», declaró el 10 de febrero a la AFP. Su hermano pequeño, Vladímir, también ex-campeón de boxeo, se ha adherido de igual manera a los reservistas.

El antiguo campeón de peso ligero de Ucrania, Vasyl Lomachenko, se unió al batallón de defensa territorial de Bílhorod-Dnistrovskyi, cerca de Odesa. El boxeador de 34 años apareció en Facebook vestido de uniforme militar, con una ametralladora al hombro.

Oleksandr Usyk, campeón del mundo de pesos pesados, posa él también con un arma en la mano, en la cuenta de Instagram del club de boxeo de Járkov sobre este mensaje: «Oleksandr Usyk se ha unido a la defensa territorial de la capital y de la región de Kiev». Entrevistado por la CNN desde la bodega de su casa, cerca de Kiev, declaró querer «defender su casa, su mujer, sus hijos y sus allegados». «No quiero disparar, no quiero matar», pero en caso de ataque, añade, «no tendré más opción que responder».

Biatletas

Los deportistas biatletas ucranianos rechazaron disputar la Copa del Mundo de mitades de marzo. En sus redes sociales, Dmytro Pidruchnyi, campeón del mundo en persecución en 2019, publicó una foto con vestimenta de combate en Ternopil, al oeste de Ucrania, donde dijo haberse unido a la Guardia Nacional.

En un comunicado publicado el miércoles, la Federación Internacional (IBU) informa que un joven biatleta ucraniano, Yevhen Malyshev, murió esta semana en acto de servicio en el ejército ucraniano. Tenía 19 años.

Tenistas

Sergei Stakhovsky, exnúmero 31 del tenis mundial, también se ha unido a «la resistencia territorial». «No tengo experiencia con las armas a título privado», declaró el jugador retirado de 36 años entre lágrimas en Twitter.

«Espero no tener que utilizar un arma de fuego», confesó el martes a la emisora británica Radio 4.

Stakhovsky dejó a su familia en Hungría. «No sé cómo lo he hecho. Es muy duro para mi mujer. Mis hijos no saben que estoy aquí. No entienden la guerra», concluyó.

La ucraniana Elina Svitolina, con falda azul y camiseta amarilla, los colores de su país, derrotó el martes a la rusa Anastasia Potapova en el torneo WTA de Monterrey, en México. «Todas las primas que gane aquí irán al ejército», declaró muy emocionada bajo los aplausos del público. «Ahora estoy lejos de ti, lejos de mis próximos, lejos de mi pueblo, pero mi corazón está lleno de ustedes», había escrito el día anterior en Twitter. «Yo soy Ucrania, nosotros somos Ucrania».

Recibió el apoyo de la campeona rusa Anastasia Pavlyuchenkova que ha mostrado su «desacuerdo» con esta guerra con Rusia. «No tengo miedo de decir cuál es mi opinión. Estoy contra la guerra y la violencia».

Futbolistas

Varios futbolistas de la selección ucraniana, entre ellos las estrellas Oleksandr Zinchenko y Andrei Yarmolenko, llamaron a «resistir» contra la invasión rusa en un video publicado por la Federación Ucraniana (UAF).

«Pedimos a todo el mundo del fútbol que se oponga a la propaganda rusa, que muestre la verdad sobre la guerra de Ucrania por todos sus medios posibles», clamaron 13 jugadores de la «Zbirna».

Zinchenko (Manchester City), Yarmolenko (West Ham), Ruslan Malinovskyi (Atalanta) y Andriy Pyatov (Shakhtar Donetsk) entre otros van apareciendo en un clip de dos minutos, entrecortado por imágenes del conflicto.

Varios de estos internacionales han recaudado 500.000 euros (558.300 dólares) para las fuerzas armadas ucranianas que pelean contra Rusia.

El entrenador ucraniano del club moldavo Sheriff de Tiraspol, Yuriy Vernydub, regresó a su país de origen para participar en su defensa. El entrenador adjunto ucraniano del Dínamo de Moscú, Andriy Voronin, dejó su puesto para irse a Alemania. Voronin declaró al diario alemán Bild que «no podía seguir trabajando en el país que bombardea su patria». Palabras que recuerdan las de Ivica Osim, nacido en Sarajevo, cuando presentó su dimisión como seleccionador de Yugoslavia en 1992.

Andrei Shevchenko, el antiguo delantero estelar del Dínamo de Kiev, AC Milan y exseleccionador de Ucrania, está muy activo en las redes sociales, que utiliza para difundir cada día mensajes de apoyo a su país. El Balón de Oro 2004, que jugó en el Chelsea durante los últimos años de su carrera, participó el domingo en una manifestación en Londres, donde posó en una foto junto con una bandera sobre su espalda junto a uno de sus hijos. El martes por la noche, antes de la ida de la Copa de Italia entre el AC Milan y el Inter (0-0), el antiguo rossoneri apareció en un mensaje en vídeo, envuelto en una bandera azul y amarilla, para hacer una llamada a la paz bajo los aplausos de San Siro. Después de su retirada deportiva, Shevchenko intentó iniciar una carrera política, pero no fracasó en su intento de ser diputado del parlamento ucraniano en 2012.

Atletas

Más discreto, Sergueï Bubka, leyenda del salto de pértiga y presidente del Comité nacional olímpico ucraniano (NOC), compartió en Twitter la llamada a excluir de las competiciones internacionales a los deportistas rusos y bielorrusos, lanzada el lunes por el Comité Olímpico Internacional (COI). En un mensaje previo, publicado durante el tercer día de la invasión rusa de Ucrania, el primer hombre en la historia en haber superado la barra de 6 metros mostró su agradecimiento por los mensajes de apoyo procedentes de todo el mundo. «La guerra debe cesar, la paz y la humanidad deben prevalecer» añadió.

Adidas suspende su patrocinio con la Federación Rusa de Fútbol

El gigante mundial de equipamiento deportivo Adidas anunció este martes haber suspendido su patrocinio con los deportistas de la Federación Rusa de Fútbol debido a la invasión de Ucrania, anunció un portavoz.

«Adidas suspende con efecto inmediato su patrocinio con la Federación Rusa de Fútbol», explicó la empresa, que realizó en 2020 el 2,9% de su cifra de negocios en la región de Rusia, Ucrania y países de la antigua URSS.

Y así, el mundo del Deporte ha reaccionado bastante más que otras industrias del quehacer mundial y disciplinas como el atletismo, voleibol, tenis, ciclismo, patinaje, entre otros han expresado una lluvia de sanciones sobre Rusia.

La conclusión a la cual llegó el economista Leonardo Buniak se puede considerar como la manera más clara de sintetizar y resumir el conflicto:

“En conclusión –insiste Buniak- Ucrania va seguir siendo atacada por los cuatro puntos cardinales; por el este desde la región del Donbass, por el norte desde Bielorusia, por el sur desde Crimea y el mar Negro y por el oeste a través de la República Moldava Pridnestoviana de Transnistria, que es una especie de estado de facto que nació bajo las faldas del Kremlin, en consecuencia, esto estaba preparado, el objetivo es claro, sacar a Ucrania de la órbita europea y de la OTÁN y está en línea con las ambiciones expansionistas de Rusia, por esa nostalgia postsoviética de Putin de intentar reestablecer las viejas fronteras de la Unión Soviética”.

El mundo está atento, el mundo exige paz, el mundo llora la invasión, la mortandad de soldados y del pueblo ucraniano, de soldados rusos. El mundo rechaza estos métodos de solución de un conflicto, porque no se soluciona nada, se agrava la crisis y el mundo entero sale afectado.

NAM/Ernesto Ríos Blanco/Reportajes Especiales

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