La nueva moda, que no termina de llegar, son las pantallas flexibles. Mientras, el tamaño de pantalla de los celulares de último modelo hace rato que superaron las seis pulgadas.
El LG V50 ThinQ 5G -anunciado en el MWC de Barcelona en febrero de este año- es el primero que se lanza con dos pantallas OLED con un foco claro en el disfrute de los juegos de video. Se trata, claramente, de un equipo de gama alta.
Se trata de una pantalla principal OLED FullVision de 6,4 pulgadas que mide 16,25 centímetros y cuya relación aspecto es de 19.5:9.
La segunda pantalla, mientras tanto, es una OLED de 6,2 pulgadas que puede girarse 360 grados, y se vende por separado de manera similar a los Mods de Motorola. Se llama LG Dual Screen y cumple la función de funda y pantalla que se puede ajustar a gusto, de acuerdo a lo relatado por El Androide Libre.
La multitarea es más sencilla, las fotografías se ven en una vista previa y los gamers pueden usar la segunda pantalla como un joystick, mientras que divisan la acción en la principal.
Además, se puede tener abiertas dos redes sociales al mismo tiempo sin tener que andar partiendo la pantalla, algo bastante incomodo; o desarrollar una videollamada de manera más sencilla.
En el aspecto de las cámaras fotográficas, el LG V50 ThinQ 5G viene con la friolera cantidad de cinco. En las traseras, tiene un sensor principal de 12 MP, un gran angular de 16 que permite realizar tomas de hasta 107 grados y un teleobjetivo de 12 MP. En la parte delantera hay dos cámaras, una estándar de 8 MP y un angular de 5.
Un detalle: el equipo permite utilizar las tres cámaras a la vez para obtener una única imagen y hasta se puede disparar al mismo tiempo.
Las imágenes son mejoradas con IA y se pueden realizar tomas de video en 4K y HDR 10.
El sonido es destacable, de acuerdo a lo que informa el fabricante: el equipo incluye un altavoz estéreo de rango completo, un Hi-Fi Quad DAC 32 bits para eliminar ruidos, sonido envolvente DTS:X 3D y un parlante extra para graves.
Otras características: el grosor es de 8,3 millimetros, sus bordes son redoneados y tiene certificación IP68 contra el polvo y el agua (inmersión de 30 minutos de hasta 1,5 metros de profundidad).
En España, el equipo se vende con la pantalla secundaria de regalo y cuesta 1.300 euros, unos $ 67.000 (más caro que lo que cuesta un Samsung S10 acá). Un gran equipo pero con un precio que lo hace pensar dos veces.
NAM/Con información de Infotechnology
