Una tarde de diversión se convirtió en una pesadilla para la familia de Alejandro Ferrer, de 13 años, quien salió de su vivienda con sus amiguitos a bañarse en el Lago de Maracaibo, sin percatarse del oleaje y la profundidad del estuario marabino, cuando fue arrastrado por la furia de las aguas.
El adolescente estaba residenciado en las adyacencias del antiguo Hotel Granada. Según la versión de sus compañeritos, desapareció en aguas del Lago, en la segunda etapa de la Vereda del Lago, en Maracaibo.
Los chamos contaron que Alejandro estaba con dos compañeritos bañándose, y debido a la intensidad del oleaje se estaban ahogando, trataron de nadar, pero para el menor fue infructuoso el intento.
Una unidad de los Bomberos Marinos, coordinados por el teniente Ricardo Ramírez se apersonó al lugar, así como efectivos de Polimaracaibo, junto a la tía del menor.
Se conoció que el cuerpo del niño fue arrastrado hasta la zona dragada y desapareció. La unidad bomberil inició la búsqueda.
NAM/José Andara
