El gobierno brasileño reconoció el viernes como “justa” la condena expresada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, por la tortura y muerte del conocido periodista Vladimir Herzog durante la dictadura militar de Brasil.
El ministro de Exteriores brasileño, Aloysio Nunes Ferreira, dijo que es “incuestionable” el respeto que brinda el gobierno a la decisión que tomó la comisión a principios de semana.
Herzog fue asesinado en 1975 mientras estaba detenido en una cárcel militar en la ciudad de Sao Paulo.
El ejército dijo en aquella época que había sido detenido porque era sospechoso de actividades “subversivas” y que se suicidó colgándose con la ayuda de su cinturón.
La indignación pública causada por su muerte llevó al desmantelamiento gradual del régimen que gobernó el país de 1964 a 1985.
NAM/AP
