viernes 29 de marzo de 2024

¡SOLDADO CUENTA DETALLES DEL CRIMEN! HAITÍ: Había un infiltrado en la residencia del presidente Jovenel Möise

A las luces de la investigación del magnicidio contra el mandatario de Haití, Jovenel Möise, esta vez habló el soldado retirado de nacionalidad colombiana, Juan Carlos Yepes Clavijo, detenido y acusado por el asesinato del joven presidente.

Contó que el mandatario de Haití tenía un infiltrado en la casa donde residía, quien dio la señal para iniciar el ataque. Se trata de un plan que tenía muchísimo tiempo de preparación y este infiltrado ya estaba pagado para ejecutar su labor y siguen latentes varias interrogantes sobre el asesinato del Jovenel Möise. Lo que ocurrió está lejos de considerarse un caso cerrado, ya que las autoridades haitianas siguen interrogando a los implicados.

Las citaciones a Fiscalía del primer ministro Claude Joseph y del jefe de seguridad del presidente Dimitri Hérard, fueron solo el inicio.

El infiltrado dio detalles del magnicidio del presidente de Haití

Esta vez habló el soldado retirado de nacionalidad colombiana, Juan Carlos Yepes Clavijo, detenido y acusado por el magnicidio del presidente haitiano.

Contó que el mandatario tenía un infiltrado en la casa donde residía, quien dio la señal para iniciar el ataque.

Además de eso, el día del operativo se sumaron policías haitianos para participar en el crimen.

De ser cierto, sus palabras responderían una de las incógnitas del caso, ya que las autoridades cuestionaban cómo lograron entrar a la casa sin resistencia.

Inicialmente se ha señalado a Dimitri Hérard por ser el responsable de la seguridad. Él se negó a asistir al interrogatorio, por lo que fue detenido.

Se desconoce si Yepes Clavijo reveló quién era el infiltrado.

«Si eres responsable de la seguridad del presidente, ¿Dónde estabas? ¿Qué hiciste para evitarle ese destino?», insistía el fiscal haitiano Bedford Claude, que investiga desde el inicio la posible participación de Hérard, replicó.

Un viaje supuestamente engañoso

Son varios los nombres que resuenan en el caso como presuntos involucrados.

Christian Emmanuel Sanon es uno de ellos. El médico se habría reunido en noviembre del año pasado en la sede de la compañía de seguridad de CTU Security en Miami con otros interesados en ver caer a Moise.

Aquí es donde coincide parte del testimonio del soldado retirado con una de las hipótesis que se manejaban días atrás. Juan Carlos Yepes Clavijo indicó que llegó a Haití creyendo que iba brindar seguridad a Sanon, quien desde 2011 no ocultaba sus intenciones de ser presidente.

Él aseguraba ser el mandatario ideal, usar las riquezas del país para supuestamente sacarlo de la pobreza.

Lo primero que recibieron él y los demás involucrados fueron chalecos negros.

Cuenta que se los entregaron en una casa privada en los primeros ocho días de haber llegado al país caribeño. Un grupo de implicados fue trasladado a un hotel y otro grupo permaneció en una residencia.

Entrenaron por varios días mientras les aseguraban que ayudarían a ejecutar una captura.

Armas defectuosas

Lo siguiente fue el armamento. El sargento retirado del Ejército colombiano Duberney Capador —quien murió en los enfrentamientos de esa noche— era quien daba las órdenes. Las armas comenzaron a llegar 72 horas antes del asesinato a una casa en una montaña.

Pero no llegó todo lo necesario y Capador se negó a ejecutar la operación. Al día siguiente llegó otra tanda de municiones que tampoco fue suficiente. «No había el suficiente material para la seguridad de nosotros», agregó en su confesión.

Dice que utilizaron «armas cortas y largas, escopetas, entre otras», pero muchas de esas armas «tocó devolverlas porque no servían». La logística del armamento la habría planificado Capador junto a «un haitiano apodado Bahio o Bahión, que hablaba español».

Puede que se refiera a Joseph Félix Badio, un exfuncionario del Ministerio de Justicia de Haití, ahora capturado. La policía de Colombia, que está colaborando en las investigaciones, lo señaló recientemente como el responsable de ordenar el asesinato.

Este se habría reunido con dos mercenarios colombianos en Puerto Príncipe, declaró el general José Vargas, jefe de la policía colombiana.

Durante esa reunión, fueron «informados de que iban a detener al presidente haitiano».

También estaban en el encuentro Emmanuel Sanon, el sargento retirado del Ejército colombiano Duberney Capador y Germán Rivera, excapitán que quedó detenido.

Este último habría recibido 50000 dólares para la organización del viaje; pero no hay información sobre quién proveyó el dinero.

No obstante, «varios días antes, al parecer tres, Joseph Felix Badio (…) le indica a Capador y Rivera que lo que tienen que hacer es asesinar al presidente de Haití», agregó Vargas, director de la policía colombiana.