Los entrenamientos del primer equipo del FC Barcelona comenzaron este lunes bajo la supervisión de Ronald Koeman y lo más destacado fue la ausencia del capitán Lionel Messi.
Otro dato curioso es que ninguno de sus compañeros más cercanos como Jordi Alba, Luis Suarez y hasta el catalán Gerard Piqué, que no tiene pelos en la lengua en situaciones como esta, se han pronunciado en cuanto a este tema.
El vestuario ha estado tenso desde la humillante derrota 8-2 frente al Bayern Múnich en los cuartos de final de la Champions League y de perder la Liga frente a sus eternos rivales, el Real Madrid.
Ya han pasado un par de semanas desde que salió a la luz las intenciones del astro argentino de salir del conjunto culé y aunque ninguno de los involucrados se ha manifestado abiertamente, ninguno lo niega. Además, se ven los movimientos dentro y fuera de las instalaciones que le dan fuerza a este rumor.
Messi tampoco se presentó a los test de Covid-19 que se realizaron el domingo como parte del protocolo para regresar a la actividad. Esto demuestra un acto de rebeldía del jugador al ver que la directiva se aferra a no soltarlo.
Se han activado las medidas legales para frenar la salida del argentino pero este no se ha quedado atrás y esta decidido a salir este verano de Barcelona. Su destino aún incierto lo ha acercado más al Manchester City.
El entorno del jugador se ha mantenido muy silencioso y bajo perfil, posiblemente esperando que el mismo Lionel se pronuncie para ellos emitir sus puntos de vista.
NAM/Meridiano