La posición del gobierno de Nicolás Maduro se encuentra en una fase de autoprotección y subsistencia ante los embates de la Casa Blanca, que consisten en cortar todas las fuentes y redes de financiamiento del aparato de poder del oficialismo.
Jorge Arreaza, ironizó este miércoles sobre el comunicado emitido por el Gobierno español, que mostró su “preocupación por la paralización de las negociaciones que habían venido desarrollándose en los últimos meses entre actores venezolanos con mediación noruega”.
Al respecto, Arreaza respondió: “Al leer este comunicado, asumimos que el muy preocupado gobierno español debe estar haciendo gestiones, presionando a Washington para que Donald Trump levante las sanciones ilegales y el bloqueo criminal impuesto para hacer sufrir al pueblo venezolano”.
El gobierno español no ha reaccionado al respecto, pero el sistema diplomático del gobierno de Maduro brega para lograr un alivio del régimen de bloqueos y retenciones de fondos venezolanos en el sistema financiero de la Unión Europea.
NAM/Ricardo Serrano
