Cientos de mujeres se avergüenzan cuando, en pleno acto sexual, se les escapa un sonido similar a un gas. Sin embargo, esto es una situación completamente común y natural por lo que no se debe sentir incomodidad ni asco, a pesar de la poca información que tanto hombres como mujeres tienen sobre el tema.
Los llamados gases vaginales no son en realidad gases, no tienen nada que ver con las flatulencias anales ni generan mal olor. Son resultado del aire que queda atrapado entre los pliegues de la vagina cuando, debido a la excitación, se expande. En el momento en el que los músculos vaginales se relajan, generalmente al terminar el acto sexual, el aire sale del conducto liberando este sonido.
Para evitar que esto suceda, te recomiendo los ejercicios de Kegel, que fortalecen los músculos del piso pélvico, que sostienen el útero, la vejiga, el intestino delgado y el recto. Además puedes hacerlos como entrenamiento muscular del suelo pélvico, casi en cualquier momento y así mantener los músculos de tu vagina tonificados.
Cómo hacer los ejercicios de Kegel
Para identificar el musculo pubocoxigeo, lo recomendable es, orinar y apretar el musculo para detener la orina, haciendo una micción interrumpida.
Apriete los músculos del piso pélvico. Manténgalos apretados y cuente hasta 3 a 5 segundos.
Relaje los músculos y cuente hasta 3 a 5 segundos.
Repita 10 veces, 3 veces al día (mañana, tarde y noche)
Otra excelente opción, es utilizar las bolas chinas o de contrapeso vaginal, mañana y noche, durante 10 minutos. Esto ayudará a que tu vagina esté tonificada.
Recuerda que la salud sexual es importante.
NAM/María Fernanda Prieto
Psicóloga y Sexóloga.
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