Desde vivir en malos olores, barro, enfermedades, la acumulación de limo en frente de las casas, el deterioro de las calles, y hasta la falta del servicio de gas y calles aún no consolidadas son las problemáticas que les ha tocado enfrentar a los habitantes del sector de Villa San Isidro.
Esta comunidad tiene años exigiendo respuestas sobre el bote de aguas residuales, alcantarillas sin tapas, carreteras dañadas y sin asfaltado que lleva tiempo perjudicando el tránsito en las calles. Vienen padeciendo esta situación desde hace 13 años.
Villa San Isidro, ubicada en Maracaibo, mejor conocida como “Las casitas” hoy día, vive en medio de una complejidad que viene desde la construcción del conjunto residencial que, sin lugar a dudas, ha generado secuelas a los habitantes del sector y que al paso de los años agudiza.
Son resistentes y resilientes, pero los ríos contaminados son los que golpean más duro. Para Yojana Castro, perteneciente del consejo comunal, vocera de alimentación del órgano ejecutivo, firmante de la carta de residencia, la situación se origina desde la construcción de las casas mediante instalación de tuberías inadecuadas.
“Es una problemática bastante amplia en la comunidad. El ingeniero Luis Leal, perteneciente a la empresa ‘Omega’ nunca pensó que este complejo habitacional era tan amplio, por lo que colocó tubería de pulgadas anchas en la primera etapa, luego la redujo a menos pulgadas y desde allí nace nuestra problemática del brote de aguas residuales. Hay que hacer un trabajo de tuberías para poder solucionar cierto problema”.
Asimismo, destacó que las familias más afectadas son las que se ubican en las etapas 1 y 4, las calles 5 y 10 del sector, pues, están padeciendo problemas de salud, principalmente en los niños.
La cosa empeora
Al paso de los años, las calles que a menudo se encuentran inundadas por desbordes de cloacas se vienen deteriorando cada vez más, presentando huecos, limo y monte, lo cual las hace cada vez más intransitable y menos vivible: “Para pasar por esas calles hay que pensarlo dos veces, por el olor y los excrementos que ves ahí”. Afirmó Yadira Barrios residente del sector.
Para Yadira, las condiciones en las que se encuentran las calles de Villa San Isidro son poco favorables para que los niños salgan a jugar e incluso para que toda persona camine seguro. “Le pedimos a los entes gubernamentales que se acerquen a la comunidad para que vean como están las calles de la Villa y resuelvan”.
Respuesta institucional
Según Dixon Carrillo, jefe de enlaces de los servicios públicos de Maracaibo oeste, se ha solventado la problemática mediante el mantenimiento de las tuberías de aguas servidas.
“En reiteradas oportunidades se le ha hecho mantenimiento a más del 60% de las tuberías, pero todavía existe obstrucción de un 40% para que la situación sea solventada”.
Asimismo, Carillo señaló que han visto progreso con el trabajo que se ha hecho en búsqueda de solucionar y desnivelar la cantidad de agua servida que se estanca en las calles. “Hay un mejor descenso de aguas residuales, y es de un 70%”.
Calles de barro a estas alturas
“Vamos a cumplir catorce años sin contar con la solución para que nuestras calles sean asfaltadas, nos tienen engañados, nos dicen que vendrán al solventar el problema, sin embargo, no dejan embarcados”. Explicó Yumaira Mavo, habitante de la sexta etapa de la comunidad Villa San Isidro.
Vivir entre el barro, aguas residuales y el mal olor es una odisea para los habitantes de la sexta etapa de Villa San Isidro, quienes se sienten olvidados por los entes gubernamentales por no contar con aceras y una vialidad digna, donde los niños y todos los habitantes puedan caminar seguros.
Magaly Chacin, residente de la comunidad y madre de una niña de 5 años de edad explica que cuando dan el agua por tubería el asunto empeora y cuando llueve todo se convierte en pantano.
“El problema se agudiza cuando llega el servicio de agua potable y cuando llueve, porque, causa el derrame de aguas residuales impidiendo la salida de los niños a la escuela, además de que paraliza el paso de los vehículos a la zona”.
Habitantes del sector cifran sus esperanzas de que, de un momento a otro. Los entes encargados puedan hacer frente a la problemática que lleva años sin solventar.
Otro calvario, el gas
No contar con el servicio de gas doméstico por tuberías es otra calamidad que enfrenta la comunidad de Villa San Isidro. La solución más cercana que han tenido es la compra y venta de bombonas por medio de jornadas hechas por el consejo comunal.
“La gestión de la bombona es a través de la empresa “Gas Comunal” junto con los consejos comunales a precio solidario. Mensualmente se vende el llenado para la comunidad de Villa San Isidro” Explicó Royasmi Asansa perteneciente al consejo comunal del sector.
La venta del llenado de bombonas se ejecuta mediante la planificación del consejo comunal de manera ordenada, donde los habitantes llevan sus bombonas a las personas encargadas de cada etapa del sector.
El precio de cada llenado de bombonas varía dependiendo de los kilogramos que desee cada residente. 10, 18 y 27 kilogramos, tienen un costo de 18, 22 y 25 bolívares respectivamente.
Villa San Isidro es otra comunidad más con una radiografía que no muestra un buen semblante. Aguas residuales, calles rotas, falta de gas, calles de arena afectan significativamente la vida de sus habitantes.
NAM/Texto y Fotos: Jerusa Fernández/Pasante
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