jueves 4 de julio de 2024

¡SE ABRE EL TABLERO! LVL: El protagonismo de Guaidó se ha fortalecido tras ataques a la AN

La dinámica política en Venezuela ahora se extrapoló al plano social de una manera mucho más profunda, pues se ha incrementado la expectativa en la opinión pública sobre un eventual cambio político en el país este año, dado que el grado de conflictividad entre los poderes del Estado obstaculiza cada vez más la capacidad del Gobierno de generar mecanismos de soluciones a la crisis económica del país, tanto por falta de voluntad política como por incapacidad financiera.

Y es que el presidente de Datanálisis, Luis Vicente León, señaló este miércoles que el impacto más importante de los eventos ocurridos en la Asamblea Nacional (AN) “es el fortalecimiento del protagonismo de Guaidó, que se había debilitado en los últimos meses, aunque no había dejado de ser el líder con mayor respaldo popular”.

La cadena de hechos de alto impacto político, social y mediático con las confrontaciones del año 2019 entre los gobiernos de Maduro y Guaidó, las protestas y tensión en las calles, aunado a la polarización política y social por la gravedad de la crisis económica y el atrincheramiento del chavismo en el poder, causaron en la población venezolana un sentimiento de apatía hacia la figura del líder opositor como agente político de posibilidad de un cambio en el estado de cosas, contexto y sistema imperante en Venezuela.

Sin embargo, con el posicionamiento que ha tenido Guaidó estos días tras el asalto del chavismo al Parlamento, vuelve a adquirir relevancia política y reforzamiento diplomático e internacional, lo cual genera un efecto político inmediato de expectativa en la sociedad venezolana orientada a esperar más acciones radicales de Guaidó y su proyecto de transición contra el gobierno de Maduro.

Asimismo, León indicó que el impacto del conflicto entre Irán y Estados Unidos sobre Venezuela “ha sido positivo en términos de ingresos petroleros. Pero dada la estructura actual de sanciones, la capacidad de expansión local está muy limitada. Lo que puede elevarse es la presión de EEUU para resolver la crisis venezolana».

De hecho, sobre esa nueva fase de presión se sostiene la plataforma de Guaidó como gobierno interino, aunque sea un elemento simbólico de su proyecto político, pero que cuenta con el respaldo financiero y diplomático de una potencia global que, hasta ahora, no ha descartado usar la fuerza militar si la crisis de Venezuela llega a un punto de colapso y desgaste en grado de catástrofe humanitaria mucho peor en 2020 que en 2019.

Sostuvo que “Maduro también intenta mostrar las fracturas internas opositoras (que sí existen) y las tratará de explotar alrededor de una convocatoria rápida de elecciones parlamentarias, que representará retos mayores para sostener la reconexión”.

“La economía venezolana está contraída y débil y es difícil imaginar un rescate de equilibrios sin una reestabilización política y liberación de sanciones. Pero en algunos segmentos burbuja, la economía, siempre rebelde, comienza a habituarse y funcionar en divisas”, agregó.

Las sanciones se posicionan entonces como un mecanismo de presión política, pero generan efectos colaterales económicos internos que trastocan el apoyo de los venezolanos a Guaidó, lo cual a su vez reduce su capital político y enfoca la opinión pública hacia una percepción de que la crisis venezolana debe resolverse con una acción de fuerza ante las acciones y solidez del gobierno de Maduro en el poder.

Añadió que sin rescatar los equilibrios políticos y poder negociar una apertura internacional “es difícil que un modelo económico, incluso si se moderniza, funcione. Sin cambios políticos, la palabra que definirá la economía venezolana es supervivencia, no desarrollo y crecimiento».

 

Ricardo Serrano