domingo 12 de mayo de 2024

A?ROTOS LOS SUEA�OS! Abusos sexuales sacuden la mA?s famosa cantera del fA?tbol brasileA�o

Seguir los pasos de su paisano Ganso y repetir el camino exitoso de Neymar. Fue con ese idea en la cabeza que Ruan PA�trick Aguiar de Carvalho saliA? a los 10 aA�os de una pequeA�a ciudad de ParanA?, en el sur de Brasil, para embarcar rumbo a SA?o Paulo y enrolarse en un equipo aficionado. Pero nunca pudo cumplir el sueA�o de ver su nombre en los informativos como una historia mA?s de un niA�o pobre que alcanza el estrellato del fA?tbol. Ahora, Ruan sA� ha saltado a las pA?ginas de los periA?dicos, aunque por un motivo mucho mA?s sA?rdido: ha presentado una denuncia ante la policA�a por abusos sexuales contra Ricardo Marco Crivelli, Lica, coordinador de las categorA�as de base del Santos, la cantera de futbolistas mA?s famosa de Brasil. Lica niega la acusaciA?n, pero la policA�a ha abierto una investigaciA?n para aclarar el caso.

El Santos es uno de los mA?s tradicionales viveros de jugadores de SudamA�rica. De A�l salieron figuras como PelA�, Robinho o Neymar, que ayudaron a crear la fama de los meninos da Vila (Vila Belmiro es el nombre del estadio) como son conocidos los chicos formados allA�. Ricardo Crivelli, que ya habA�a prestado servicios a clubes como Portuguesa y SA?o Paulo, llegA? al Santos en 2008. Su misiA?n era buscar nuevos talentos por todo el paA�s, trabajo para el que demostrA? gran olfato. A�l fue el descubridor de gente como Gabriel Barbosa, Gabigol, el actual lateral de la Juventus Alex Sandro o el exmadridista, ahora en el Manchester City, Danilo.

Crivelli conociA? a Ruan en 2010, cuando el chico tenA�a 11 aA�os y vivA�a en SA?o Paulo, donde estaba sin club tras haber dejado el modesto Portuguesa Santista. SegA?n ha declarado a la policA�a, una noche Lica comenzA? a acariciar su cuerpo y acabA? praticA?ndole sexo oral. a�?El tipo me prometiA? que me llevarA�a para jugar en el Santos. Y tras algunas semanas, me llamaron para entrar en el cluba�?, cuenta Ruan a EL PAA?S.

El chico permaneciA? en los equipos base del Santos durante un aA�o y medio. A lo largo de ese tiempo, conviviA? con las burlas de sus compaA�eros de equipo, que se mofaban de su proximidad con el tA�cnico. Ruan relata que, cuando estaba a punto de subir de categorA�a en el fA?tbol base, Lica lo invitA? a dormir en su apartamento, pero A�l lo rechazA?. A partir de entonces, no tuvo mA?s oportunidades, y el club acabA? prescindiendo de A�l. a�?Fue una frustraciA?n muy grandea�?, dice mientras acomoda la visera sobre su cabeza. a�?Mi sueA�o era jugar en el Santos. Y todo acabA? de esa manera.a�?

El chico habA�a sido presentado a Lica por intermedio de Ronildo Borges de Souza, conocido como Batata, un ojeador que se dedicaba a llevar a SA?o Paulo chicos de otras partes del paA�s, con quien viviA? durante una temporada. Ruan dice que tambiA�n llegA? a ser acosado por Ronildo Borges, detenido hace dos aA�os en una casucha donde albergaba 11 adolescentes y condenado por estafa, explotaciA?n sexual y creaciA?n de una cA?rcel privada.

Ruan se acostumbrA? a vivir lejos de casa. Su madre lo abandonA? muy pronto. Fue criado por su padre, que tiene otros 13 hijos y seguA�a desde A�a distancia su aventura en el fA?tbol. DespuA�s de dejar el Santos, rodA? por equipos mA?s pequeA�os, pero en ninguno logrA? abrirse paso. Estuvo en varios clubes menores de Brasil, como el Red Bull y el ParanA?, y hasta en el Suryoye Paderborn, de la quinta divisiA?n alemana. Pero su desempeA�o en el campo nunca acabA? de despegar. a�?Por todo lo que pasA� en los tiempos del Santos, me quedA� bastante agobiado. Solo querA�a olvidar y continuar jugando al fA?tbol, pero no lo conseguA�a. Los abusos que sufrA� me trastornaron, me convirtieron en otra personaa�?. VolviA? a MarabA?, su ciudad natal, pero las cosas no fueron mejor: a�?Hice un montA?n de tonterA�as. EmbestA� el coche de mi hermano, me metA� en cosas equivocadas y bebA�a bastante. No era el rumbo que querA�a para mi vida.a�?

Centro de entrenamiento del Santos, que lleva el nombre de PelA�.ampliar foto
Centro de entrenamiento del Santos, que lleva el nombre de PelA�.
ResolviA? recurrir en el inicio de este aA�o a la ayuda de Luciano Pereira, un agente que habA�a conocido en SA?o Paulo. Hizo las maletas otra vez al saber que el intermediario habA�a abierto una puerta para regresar al Santos. a�?Mi alegrA�a durA? pocoa�?, dice Ruan, recordando el momento en que Pereira revelA? que Ricardo Crivelli habA�a asumido el mando de la cantera del club y serA�a el responsable de gestionar su vuelta. a�?En vez de sonreA�r, se quedA? paralizado cuando se lo contA�a�?, afirma el agente. Ruan rechazaba volver a Santos y solo entonces el jugador confesA? que a�?habA�a sucedido alguna cosa complicadaa�? entre Crivelli y A�l aA�os atrA?s.

La denuncia de Ruan ha sacudido la vida del Santos, en un momento en que un grupo de socios quiere destituir al presidente JosA� Carlos Peres, elegido a finaels de 2017, despuA�s de descubrir que el mandatario es socio del propio Crivelli en una empresa de representaciA?n de futbolistas. Ruan dice que ganaba 1.000 reales al mes (unos 250 euros) como jugador de la cantera, 700 pagados por el Santos y otros 300 por la sociedad de Peres y Crivelli. El presidente ha negado haber hecho pagos a Ruan y asegura que la empresa en cuestiA?n estA? inactiva.

Una semana despuA�s de conocerse la denuncia, el club decidiA? apartar del cargo al coordinador de la cantera. El abogado de Crivelli, Adriano Vanni, rechaza con vehemencia las acusaciones: a�?Trabaja hace muchos aA�os con chicos y nunca tuvo una mA?cula en su carrera. Confiamos en la investigaciA?n policial. Es cuestiA?n de tiempo para que la verdad se abra pasoa�?. Crivelli declararA? prA?ximamente a la policA�a, que ya ha tiene el testimonio de otro chico que tambiA�n asegura haber sido acosado por el tA�cnico en el mismo alojamiento para futbolistas donde viviA? Ruan.

NAM/El PaA�s