Cuando Meghan y Harry anunciaron su compromiso en noviembre de 2017, la prensa imaginó que la mezcla entre realeza y Hollywood sería lo más destacado en la ceremonia. No obstante, el personaje más polémico de la boda de los duques de Sussex no estuvo entre los ‘royals’, ni los Clooney, ni los Beckham, sino que en la misma iglesia anglicana.
Se trata del obispo Michael Bruce Curry. El primer afroamericano en figurar como presidente de la Iglesia Episcopal en Estados Unidos y quien, junto a una curiosa predica, fue el encargado de desafiar el «tradicionalismo» religioso en la capilla de San Jorge. Y es que el reverendo de 65 años sorprendió a toda la familia real (sobre todo a Zara Tindall, quien tuvo las mejores reacciones faciales) con un discurso que habló sobre que la esclavitud, Twitter y el poder reconstructivo del amor.
Este 19 de mayo, el obispo Michael Curry -estadounidense de nacimiento- entretuvo durante 13 minutos a los invitados a boda real. Comenzó, muy tranquilo, citando a Martin Luther King. Sin embargo, según fueron pasando los segundos, su pasión se desató frente al público e hizo gala de analogías como que el descubrimiento del manejo del fuego habría permitido que el humano acabara por tuitear.
Además de recalcar que «el poder redentor del amor cambiará el mundo» y que, en ese mismo afán, «debería casar a todos los presentes». «El amor no se trata sólo de una joven pareja. Pero el poder del amor se demuestra con el hecho de que estemos todos aquí. Dos jóvenes se enamoran y nosotros aparecemos todos», explicó entre risas, momentos después de decir que el sentimiento también nace de situaciones adversas… Como la esclavitud.
Pero esta no es la primera vez que Michael Curry protagoniza una controversia. Porque, de acuerdo con la BBC, el ministro es experto en opinar -abiertamente- sobre las injusticias sociales y pelear por los derechos de la comunidad LGBT. «Para todos los que se han sentido y han sido rechazados por la iglesia por lo que son, para todos los que se han sentido y han sido rechazados por sus familias y comunidades, que nuestra iglesia se haya abierto al amor es un signo de esperanza», habría afirmado -según The Guardian– en 2015, cuando su movimiento decidió concebir el matrimonio igualitario. Asimismo, Curry ha apoyado otras iniciativas, como el movimiento #MeToo, a través de sus cartas hacia sus feligreses.
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Pero el obispo no suele quedarse en las palabras. Al contrario, Michel Curry es un hombre de acción. Aunque seguro que después este intenso despliegue internacional, a raíz de la boda del año, el reverendo podrá desarrollar sus proyectos de forma transversal y en todos los continentes. «El amor es la manera», ha tuiteado tras su prédica y, al parecer, media Inglaterra ya lo siente en aire.
NAM/El Mundo
