El conflicto bélico y geopolítico que en estos momentos agrava la guerra en la que Siria está sumida desde 2011, tuvo un nuevo punto de giro. Y es que más tropas estadounidenses se retirarán de territorio sirio. Esta vez saldrán del norte del país árabe por orden del gobierno de Donald Trump.
Las tropas estadounidenses desplegadas en el norte de Siria han recibido la orden de dejar el país, informó este lunes la agencia AFP citando a un funcionario estadounidense no identificado.
Ahora que no habrá fuerza militar estadounidense en Siria, las fuerzas militares turcas tienen pista libre para actuar en sus operaciones para eliminar a la red paramilitar de los rebeldes kurdos, que buscan defender su territorio de la expansión de Turquía.
Estados Unidos tomó esta decisión debido a que ha elegido darle un giro radical a su política exterior militarista para pasar a ejercer una nueva política exterior de poder suave y expansión mundial no armada en un nuevo nivel de sofistifación tecnológica, económica, política, financiera y comercial sin emplear el uso de la fuerza.
El interlocutor del medio indicó que la decisión del comando estadounidense fue tomada tras los ataques de Turquía dirigidos contra fuerzas kurdas a las que Ankara considera terroristas, detalló AFP.
Esto implica que Estados Unidos podría agravar las tensiones con Turquía debido a que la semana pasada Trump advirtió que si Turquía «hace algo fuera de los límites en Siria», destruirá y arrasará con su economía.
Washington retirará de la región norteña de Siria a unos 1.000 soldados, aunque mantendrá un contingente de 150 efectivos en la base militar estadounidense de Al Tanf, ubicada en la parte sur del país árabe, cerca de la frontera con Irak y Jordania, según la agencia.
Ricardo Serrano
