María Faría, la representante diplomática designada en Costa Rica por el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, se disculpó este jueves, por haber tomado el miércoles la Embajada en San José y saldrá del sitio.
Así lo afirmó el canciller costarricense, Manuel Ventura, luego de sostener una reunión con Faría, a quien Costa Rica reconoce como embajadora de Venezuela.
«Está muy apenada y nos dijo que pedía disculpas tanto al presidente (Carlos Alvarado) y a las autoridades, como al pueblo de Costa Rica por lo ocurrido», declaró el canciller Ventura a los periodistas.
El ministro aseguró que Faría y su delegación saldrán este jueves de la sede de la Embajada y respetarán el plazo de 60 días otorgado el pasado 15 de febrero por Costa Rica a la misión del gobernante Nicolás Maduro para que ordene sus asuntos y salga del país.
El canciller costarricense dijo que el Gobierno sigue reconociendo a Faría como la embajadora de Venezuela y que ella «quiere seguir caminando de la mano de Costa Rica con las mejores relaciones».
Faría, quien no dio declaraciones a la prensa después de la reunión con Ventura, tomó posesión el miércoles de la sede diplomática en San José, según anunció ella misma en sus redes sociales.
En las afueras de la embajada se presentó Norma Borges, quien dijo ser la jefa de misión nombrada por Nicolás Maduro, pero un grupo de venezolanos que apoyaban a Faría le impidió ingresar a la sede diplomática.
El mismo miércoles la Cancillería costarricense deploró la acción de Faría y la calificó como «un procedimiento inaceptable que lesiona elementales normas diplomáticas de respeto y confianza de las relaciones en la comunidad internacional, y sobre todo, del derecho internacional».
NAM/Agencias
