El aspirante a presidente en las elecciones celebradas el pasado miércoles en Indonesia, el exgeneral Prabowo Subianto, convocó hoy a sus seguidores islamistas en Yakarta para reivindicar su supuesta victoria, a pesar de que el recuento no oficial dio como ganador al actual presidente, Joko Widodo.
Centenares de miembros del movimiento islamista 212, que agrupa varias organizaciones musulmanas ultraortodoxas, acudieron en torno al mediodía a la residencia del exmilitar en el sur de la capital para celebrar el rezo del viernes y escuchar el discurso de Prabowo.
«Empresas de sondeos mentirosas, el pueblo indonesio no quiere volver a oíros», exclamó el antiguo comandante de las Fuerzas Armadas sobre un escenario instalado frente a su domicilio, rodeado de decenas de ulemas y líderes religiosos aliados durante la campaña electoral.
Las proyecciones realizadas por empresas independientes sobre muestreos de votos, que han demostrado su viabilidad en comicios anteriores, dieron como ganador a Jokowi, apodo del presidente, con el 54 %, por el 45 % de Prabowo.
Indra Purwanto dijo a Efe que acudió al acto «para legitimar que el presidente Prabowo ganó según el recuento real, no según el recuento no oficial de la televisión».
Por su parte, la joven de la asociación Universitarios Amantes del Islam, Intan Zein, advirtió a los que hicieron trampas en las elecciones que «los detalles más pequeños serán juzgados en la otra vida».
Jokowi respaldó el jueves los cálculos iniciales que consideró «casi iguales que el recuento real», llamó a la unidad hasta que lleguen los resultados oficiales en mayo y pidió a sus rivales políticos que ayuden a «calmar el ambiente».
Ambos candidatos ya se enfrentaron en 2014 en unos comicios que se decidieron por un estrecho margen y que el exgeneral denunció ante el Tribunal Constitucional, que desestimó el recurso.
En las semanas previas a las elecciones del miércoles, Prabowo denunció irregularidades en 17,5 millones de nombres en las listas electorales y amenazó con utilizar el «poder del pueblo» y volver a acudir a la Justicia si no se solucionaban.
El jueves, decenas de militares retirados del Ejército acudieron a la residencia de Prabowo y le ofrecieron el saludo marcial al grito de «a su servicio presidente», según un vídeo que compartió su equipo en las redes sociales.
Tras la declaración de victoria del exmilitar, la primera reacción del ministro de Seguridad, Wiranto, fue advertir públicamente que las Fuerzas Armadas y la Policía actuarán con firmeza ante cualquier amenaza contra la democracia y el Estado.
Por su parte la Comisión Electoral ha negado que existan irregularidades a una escala que pueda influir en los comicios.
Activistas aseguran que los grupos islamistas han aumentado su influencia sobre la sociedad y la política en los últimos años en Indonesia, donde el 88 % de sus más de 265 millones de habitantes practican el islam.
EFE
