En los últimos cinco años, el declive de la industria petrolera venezolana se ha profundizado de forma constante, con la amenaza de llevar a este sector a un colapso inminente. Actualmente, Venezuela apenas produce cerca de 1,2 millones de barriles de petróleo por día (mbpa), cifras que distan de los 3,5 mbpd que alcanzó a finales de la década de los años 90, previo a la ascensión del entonces teniente Hugo Chávez en el poder.
Expertos coinciden que este pronunciado declive de la producción Pdvsa, sumado a la insistencia del gobierno del actual presidente Nicolás Maduro por políticas de control y confiscación hacia sector privado, han apuntalado al país a una de sus peores crisis económicas en la historia, cuyo índice inflacionario podría cerrar en 2018 en más de 4.000.000%, según datos de la Asamblea Nacional (AN).
Pero ¿por qué es importante la industria petrolera para el reimpulso económico de Venezuela? En principio porque este sector provee al menos el 95% de las divisas que percibe la nación anualmente.
El pasado lunes 29 de octubre, el partido Voluntad Popular (VP) presentó al país un proyecto, denominado “Venezuela Energética”, que busca reubicar a Venezuela como uno de los principales productores de crudo del mundo, a partir, entre otros aspectos, por reformar la actual Ley de Hidrocarburos.
Para dirigente nacional de VP y uno de los promotores de este plan, Yon Goicoechea, los problemas en torno al sector energético en Venezuela datan desde que se apostó por conferir al Estado “la concentración del poder político y económico”.
“Esta destrucción (de Pdvsa) se debe a las medidas expropiatorias y confiscatorias del Estado, a la falta de seguridad jurídica, a la crisis generalizada del gobierno y también a una errónea idea de priorizar los precios por encima de la producción”, explicó Goicoechea.
Destacó que la estatal petrolera se encuentra “financiera, operativa y políticamente destruida” por lo que se debe instalar un debate sobre cómo lograr que “Pdvsa siga existiendo y sea rentable”.
Bajo estas condiciones, dijo, “Pdvsa no puede asumir la responsabilidad de aumentar la producción porque no puede ni mantener la producción que tiene hoy en día”, aseveró el también ex preso político.
Por ello, Goicoechea señaló que un proyecto de reforma de la Ley de Hidrocarburos debe contemplar, en primera instancia, la apertura al capital privado.
“Venezuela requeriría alrededor de 25 millones de dólares en inversión para aumentar la producción petrolera, pero no tiene ni tendrá esa cantidad en el futuro próximo. Para conseguirlos tenemos que atraer a los capitales de inversión extranjera, que hoy no vienen por las condiciones legales y económicas” del país, afirmó.
Remarcó que también se debe “flexibilizar” el sistema fiscal, puesto que hoy en día Venezuela se ubica entre los países más caros en términos tributarios, poniéndole en desventaja con relación a sus vecinos del continente. “Cuando el barril está a 70 dólares en el mundo, Venezuela cobra el 90% de impuestos, pero en Colombia se cobra el 66%, mucho más barata”, precisó.
La propuesta de la tolda naranja también plantea que en el país se establezcan mecanismos para garantizar las inversiones y que exista una competencia entre operarios petroleros, que incluya a Pdvsa, pero no como un actor principal en el área.
“Deben estar Total, Chevron, Texaco, entre otras, compitiendo por operar en Venezuela (…) pues el bienestar de los venezolanos dependerá de cuánto cobre el Estado a estas empresas por sus actividades en el país”, aseguró.
A continuación otros de los puntos del programas presentado por VP:
Permitir a las empresas petroleras extranjeras la operación primaria del crudo. “Es decir la exploración y explotación, sin la necesidad de estar en sociedad con Pdvsa”, explicó Goicoechea.
Democratizar la renta petrolera. “Tenemos que pensar que hacer con esa renta para que no pase lo de los últimos 50 años y que no sea el Estado que se haga fuerte con una sociedad débil”.
Diversificar la economía a partir del petróleo. “Que sea una fuente para que haya agricultura, turismo, educación, que impulse el sector bancario, financiero, terciario, en todas sus dimensiones”.
Pensar en una transición a las economías renovables. “Esto es importante para que Venezuela siga siendo una potencia energética”.
El dirigente opositor, miembro del partido de Leopoldo López, enfatizó que de no materializarse estos cambios en el corto plazo “Pdvsa, al igual que el país apunta hacia la catástrofe”.
“Cada año de este sistema nos va a costar dos o tres años de recuperación”, manifestó.
NAM/Caraota Digital
