Los brotes de violencia y xenofobia contra los nicaragüenses que huyen del Gobierno de Daniel Ortega y se refugian en Costa Rica, no solo se han vivido en las calles de San José, la capital, también en las redes sociales.
Perfiles de Facebook creados casi exclusivamente para difamar a los nicaragüenses, difunden información sesgada sobre la situación de los migrantes en Costa Rica y los señalan como los responsables de casi todos los males que aquejan al país: robos, asaltos, violaciones… La lista de acusaciones infundadas, en su mayoría, llena páginas enteras que incitan al odio y la violencia contra los migrantes. La mayoría de estas publicaciones son compartidas miles de veces por los usuarios.
Perfiles como Por un nuevo ejército costarricense, Alajuelita Informada o Guardia Nacional Costarricense se hicieron muy populares en las red social después de difundir información falsa. Pero también otras páginas que se hacen pasar por medios de comunicación de Nicaragua y Costa Rica y que están llenos de fake news.
El periódico La Nación se ha encargado de verificar y desmentir las noticias erróneas que inundan las redes y abonan los sentimientos nacionalistas y xenófobos. A través del hashtag #NoComaCuento, el medio desmintió la información sobre migrantes que está generado mucha crispación en el país.
Un grupo de jóvenes queman una bandera de Costa Rica
Esta fotografía, compartida miles de veces, muestra como dos jóvenes queman una bandera de Costa Rica. El texto que circulaba junto a la imagen decía que se trata de nicaragüenses quemando el símbolo patrio tico. La imagen, tomada en 2016 fue hecha durante un concierto de punk en Sabanilla de Montes de Oca. Los implicados no eran de Nicaragua.
Ayudas a mujeres migrantes trans
Según la información difundida, el presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, había decidido dar a las mujeres trans que llegaran desde Nicaragua becas, ayudas económicas y seguro de salud. Según las informaciones que circulan por redes sociales, el Instituto de Ayuda Social (IMAS) daría subsidios mensuales de 75 dólares a cada una de estas personas. Esta noticia es falsa.
La información que fue manipulada en realidad tiene que ver con un programa que este instituto dirigió a 20 mujeres trans costarricenses en vulnerabilidad que durante 2015 recibieron el apoyo del Gobierno.
Invasión de militares nicaragüenses
El ministro de Seguridad Pública, Michael Soto, desmintió que 1.000 militares nicaragüenses estuvieran a punto de entrar en Costa Rica para apoderarse del cantón de San Carlos en Alajuela, tal y como circula por cadenas de mensajes en Whatsapp. Tampoco se liberó en el país nica a 400 violadores y 350 homicidas con la condición de «invadir Costa Rica»
Construcción de ranchos para los migrantes
Otra de las noticias falsas que están circulando por las redes es que el Gobierno de Carlos Alvarado haya dispuesto fondos y tierras para construir casas a 80 familias de Nicaragua. La noticia falsa difundida por Alajuelita Informada fue desmentida por el periódico local La Nación quién consultó a la municipalidad y al Ministerio de Vivienda de Costa Rica que dijeron que no existe una «invasión de nicaragüenses» y que el Gobierno no está «aportando materiales de construcción para levantar ranchos nuevos para estas familias».
Se revocó la visa a diferentes funcionarios
El diario La Nación desmentía la información del sitio El Informe de Nicaragua, que apuntaba a que el gobierno costarricense estaba quitando la visa a políticos nicaragüenses. El rumor fue refutado por la Cancillería de Costa Rica.
Becas completas a nicaragüenses
Tampoco la Universidad de Costa Rica (UCR) le está regalando becas a los refugiados que escapan de la represión de su país. El Nuevo Diario de Nicaragüa difundía esta información falsa: «Universidad de Costa Rica dará becas totales a refugiados nicaragüenses». La Universidad también desmintió esta información y puntualizó que existe un programa de matrícula para que los estudiantes refugiados sigan con sus estudios, en condición de intercambio, pero no supone una beca total por los estudios.
NAM/AP
