La inhabilitación política del líder opositor venezolano Henrique Capriles para ejercer cargos públicos durante 15 años ha generado fuertes protestas en Caracas. En el cuarto día de protestas durante esta semana, los grupos opositores han atacado la Dirección Ejecutiva de la Magistratura del Tribunal Supremo de la Justicia.
Los manifestantes han lanzado bombas molotov contra el edificio e intentaron llegar al centro de la capital venezolana. Los cuerpos de seguridad establecieron barricadas y lanzaron bombas lacrimógenas contra los más violentos.
En la urbanización de Bello Monte la oposición denunció que fue incendiada la sede del Comando de Capriles, donde se encuentra su base de operaciones. El incendio fue controlado por los bomberos y no dejó víctimas.
La nueva jornada de violencia en Caracas ha dividido a los venezolanos. «Sería bueno que los mismos seguidores de la oposición exigirán a su dirigencia que les expliquen qué quieren lograr con esa movilización.
Otro residente, quien ha tenido que caminar esta mañana desde la urbanización de Altamira hasta Bello Monte, está seguro de que «así no va a salir adelante el país, sin duda alguna».
«Cada país tiene sus dinámicas y sus problemas y por eso no quiere decir que nosotros vamos a pedir una intervención, que nosotros vamos a pedir un desastre para nuestro país», sostuvo otra residente, quien añadió que lo que necesita Venezuela son personas «que quieran luchar por la revolución».
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