martes 23 de abril de 2024

¡POR LAS SANCIONES! Abrams asegura que China está reduciendo su apoyo económico a Maduro

La importancia geopolítica de Venezuela sigue siendo un elemento central en la política exterior de China, pero ese nexo se ha visto opacado por el efecto de las sanciones de Estados Unidos al gobierno de Nicolás Maduro, que a su vez son una clara advertencia y una estrategia de disuasión de Washington a Pekín.

Así ha quedado en evidencia con una declaración que ayer ofreció a la prensa Eliott Abrams, enviado especial de EEUU a Venezuela, quien dijo afirmó que mientras las actividades de China en Venezuela han perdido fuerza y presencia, Maduro y su gobierno socialista se apegan cada vez más a la línea de crédito salvavidas que le provee Rusia y su compañía petrolera estatal Rosneft para mantenerse en el poder, reseñó la agencia Reuters.

Abrams dijo que la vinculación de China en Venezuela «está disminuyendo y no creciendo» debido a que en el gobierno de Xi Jinping aumenta la preocupación por la negligencia económica y corrupción que tiene lugar en el país bajo el gobierno de Maduro.

En declaraciones hace un par de semanas, Abrams ya había revelado que Rusia es ahora el único soporte financiero del gobierno de Maduro, a quien le provee rutas y sistemas de transporte de crudo para evadir las sanciones de EEUU y darle mercado al poco crudo que PDVSA produce y exporta, esto en medio de una industria petrolera venezolana que está en colapso y un mercado petrolero global que cada vez se le cierra más a Venezuela por el enorme efecto de disuasión que han creado las sanciones de Washington a Caracas y países y empresas vinculadas a la cúpula de poder de Maduro.

«Es primordialmente su visión de lo que ocurre en Venezuela es un desastre», dijo Abrams agregando que altos funcionarios chinos han expresado esa preocupación y posición sobre la crisis venezolana en privado con funcionarios estadounidenses.

En sus declaraciones a la prensa, Abrams negó suministrar información detallada sobre cómo China ha reducido su apoyo a Venezuela y al gobierno de Maduro, posiblemente por tratarse de información confidencial de inteligencia, pero Abrams sí detalló que hasta ahora Estados Unidos «no es consciente» de que China haya ejecutado nuevos préstamos o inversiones en Venezuela en 2019.

De esta forma, EEUU deja entrever que sus gestiones de política exterior no solo apuntan a cortar las fuentes de financiamiento del gobierno de Maduro y asfixiarlo en todo el entramado de captación de capitales que posee mediante la venta de oro y petróleo a Rusia, sino que también busca disuadir a China de cesar totalmente su apoyo financiero a Caracas, lo cual representaría hasta ahora el golpe más fuerte que haya recibido el gobierno de Maduro después de la medida con la cual Washington confiscó Citgo y congeló todos los activos del Estado venezolano en territorio estadounidense.

Ricardo Serrano