Rafael Nadal accedió, por la vía rápida, a tercera ronda de Roland Garros, tras derrotar al estadounidense Mackenzie McDonald por 6-1, 6-0 y 6-3 en una hora y 40 minutos.
El mallorquín, que persigue su decimotercer título en París, se mostró muy sólido, con 30 golpes ganadores y pocas faltas. «El objetivo es jugar lo mejor posible, hoy un buen partido, muy contento, pasado mañana tendré otro partido complicado y espero mantener un buen nivel», aseguró.
En un clima más clemente, con la temperatura más alta que en anteriores jornadas, Nadal desplegó un juego potente, certero, que apenas dio opciones a un rival que venía con el currículum de haber alcanzado la cuarta ronda de Wimbledon hace dos años.
Pero en tierra batida apenas supo oponer resistencia contra el español, que ha venido avisando que necesita competición para afinar su juego, pero que ya demuestra un nivel elevado.
Nadal, que por vez primera llegó a Roland Garros sin haber conseguido ningún título en la gira previa de tierra debido a que solo disputó el ATP de Roma, paga todavía las consecuencias del confinamiento.
En Roma, el único torneo que jugó antes de aterrizar en París, cayó en cuartos de final contra el argentino Diego Schwartzman y ahora trata de aclimatarse a su Roland Garros más extraño, jugado en septiembre por culpa de la pandemia, en condiciones otoñales que contrastan con la habitual primavera.
El español busca en su torneo favorito su vigésimo título de Grand Slam que le igualaría con el suizo Roger Federer como tenista que más ha conseguido y haría historia en el deporte internacional.
Su siguiente rival saldrá del partido entre el japonés Kei Nishikori, que vuelve de una larga lesión, y el italiano Stefano Travaglia.
NAM/EFE
