A la mujer le diagnosticaron un cáncer terminal, por lo que decidió contar su supuesto secreto. Su respuesta al por qué lo hizo es insólita.
“Por diversión”, eso fue lo que contestó Elizabeth Bwalya Mwewa sobre los hechos que, según ella, ocurrieron entre 1983 y 1995, en un hospital universitario de Zambia.
“Sé que moriré pronto y quiero confesar mis pecados ante Dios y antes todas las personas que se han victo afectadas”, dijo la mujer, de acuerdo con medios locales.
Fue en ese momento cuando contó que en los 12 años que supuestamente trabajó en el centro médico intercambió 5.000 bebés “por diversión”.
Al final, la mujer pidió perdón y afirmó que “un demonio la utilizó para cometer semejante crimen”.
Autoridades locales abrieron una investigación y en las primeras pesquisas se identificó que el nombre Elizabeth Bwalya Mwewa no aparece en el registro nacional de enfermeras en Zambia.
RCN
