Era un mero trámite para los de Antonio Conte, que después de no poder participar en la edición pasada de la Copa de Europa, hoy a falta de una jornada ya están en los Octavos de final de la presente edición.
Con una alineación sin delanteros centros nominales, Morata partía desde el banco de suplentes y Batshuayi lesionado, el Chelsea invadía Azerbaiyán para completar la gesta en un grupo complicado.
Alineaciones:
Pese a ser infinitamente superior en cuanto a plantilla y juego, Chelsea sufría el partido ante un sólido y aguerrido FK Qarabağ, que quería seguir haciendo historia en su primera participación en la Copa de Europa pero un penal mal pitado por Sousa terminó en gol de Eden Hazard (Min. 21) y todo el trabajo se fue para el traste. Era hora de cambiar el plan.
Pero, solo 15 minutos después, una combinación entre el belga y William terminaría en gol del brasileño. 0-2 en 35 minutos y todo parecía estar resuelto. El Chelsea caminó el partido a su placer.
En la segunda mitad, Fabregas culminaría la goleada con otro gol de penal. Un partido con un ritmo muy bajo del conjunto londinense que sabía que lo importante era salir de Baku con los tres puntos para no tener que jugarse la vida en Stamford Brigde ante el Atlético de Madrid. William pondría la cereza sobre el pastel con un golazo a falta de 5 minutos para el final. Un 0-4 que evidencia las diferencia entre ambos equipos
The Blues, en su regreso al máximo nivel europeo, consigue clasificar a los Octavos de final y sigue recuperando esa identidad que lo hizo campeón de Inglaterra con una autoridad abrumadora.
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