martes 28 de mayo de 2024

¡OTRO BROTE EN CARABOBO! Vigilantes de la UC no abrirán sedes hasta ser vacunados

Los síntomas son evidentes. El personal de seguridad de la Universidad de Carabobo (UC) alertó sobre un brote de COVID-19 entre ellos y se niega a abrir las puertas de la institución hasta ser vacunados.

José Páez es vigilante en la Facultad de Ingeniería y es uno de los que han tenido manifestaciones claras de la enfermedad, pero no ha podido hacerte el descarte. “Todos los días enteramos de uno o varios compañeros que tienen síntomas o de un familiar de alguno que falleció”.

Ellos están preocupados porque han solicitado a las autoridades de la UC que los apoye con pruebas diagnósticas, medicamentos y la inmunización, pero no han tenido respuestas positivas al respecto.

“Por eso decidimos cerrar el paso a la facultad hasta que las autoridades rectorales nos firmen un compromiso serio en el que se establezca un cronograma de vacunación que nos incluya”. En su turno, de seis trabajadores, cinco presentan síntomas, lo que se traduce en un déficit importante del personal que labora 24 horas continuas y tienen 7 libres.

Esto los expone a la inseguridad, sobre todo en las noches, porque no hay alumbrado y se crea el ambiente propicio para los robos que no paran en las diferentes dependencias de la UC.

UC sin actividades

Ellos se mantienen cumpliendo horario en el Campus Bárbula, pero no permiten el acceso al personal administrativo, docente y estudiantes que realizan labores en el lugar.

“Nosotros estamos aquí atendiendo a personas durante todo el día y no nos han tomado en cuenta. Hay muchos compañeros con síntomas de COVID-19 y padres, hermanos y demás familiares que han muerto por el virus”.

En la institución, como parte de las medidas de flexibilización de la cuarentena, los decanos han autorizado el ingreso de parte de la comunidad universitaria para que realicen diversas labores, que incluyen laboratorios y clases prácticas y que se encuentras paralizadas en este momento.

A la espera de respuestas

El director de seguridad e la UC, José Luis Antón, entiende la situación. “Es un tema de salud, no de cualquier gripe, sino del coronavirus y sus riesgos”.

Son alrededor de 90 trabajadores los que están en el campus Bárbula en turnos rotativos, en contacto con todos los que tienen que desarrollar actividades en el lugar, por lo que las autoridades de la UC, desde la semana pasada, adelantaron la solicitud ante el Instituto Carabobeño para la Salud (Insalud), que depende de la administración de Rafael Lacava, una jornada de vacunación para el personal de seguridad, pero siguen a la espera de respuestas.

NAM/Caraota Digital