Existe una amplia gama de posiciones sexuales que le aportan variedad, placer y diversión. Sin embargo, son las que se caracterizan por que la mujer vaya arriba, las favoritas de ellos, y, por qué no decirlo, de ellas también.
Y es que, sin duda alguna, para los hombres, esta posición aporta gran placer sensorial y visual, debido a que en todo momento su vista se centra en una hermosa mujer estimulándolo y haciendo movimientos sexys y provocativos que, sin lugar a dudas, pondrían a vibrar a cualquiera.
Pero ella no se queda atrás, pues la posición resulta también muy favorable, además que la sensación de tener el control, nos encanta a las mujeres.
MUJERES ARRIBA
Todas las posiciones tienen su encanto, éstas suelen ser las favoritas de muchos, solo es cuestión de adaptarse a cada una de ellas, y sobre todo, disfrutarlas al por mayor. ¡A gozar!
El sapo
Aquí, literalmente, tendrás qué hacer la posición de un sapo, por lo que te colocarás en cuclillas sobre tu pareja, y estar lista para los brincos.
Misionero alternado
Para esta posición lo ideal es ponerse al borde de la cama o el sillón. Te acuestas sobre él, asegurándote que tu pierna se separe y quede en otra posición, con el in de impulsarte y crear un ritmo placentero.
Flor de loto
Aquí, lo que hay que hacer es sentarte frente a frente sobre tu pareja que estará sentada. Tú, con tus piernas rodearás su cuerpo. Es una posición muy romántica, pues tienen la oportunidad de estar abrazados, aunque la batuta la lleva la mujer. Es una posición ideal para alcanzar un profundo orgasmo, ya que se estimula el punto G como nunca.
La inversa
A mayor grado de complejidad, mayor placer. Tu pareja debe estar recostada boca arriba, mientras tú te sientas sobre él, pero dándole la espalda. Una explosión de sensaciones que los harán llegar al punto máximo.
Vaquera
Para muchos conocida como posición del molino, aquí tendrás control absoluto del encuentro íntimo. Tu pareja permanecerá recostada, mientras tú te colocas arriba de él, montándolo, sí, como una auténtica vaquerita. Tú eliges el ritmo y profundidad. Estás a cargo.
El columpio
De igual manera, tu pareja se encuentra acostado boca arriba, mientras te sientas sobre él dándole la espalda. Te puedes apoyar en sus piernas, o bien, recargarte en el piso y alzar la cadera.
NAM
