jueves 25 de abril de 2024

#Opinión Ganó la abstención (Jesús Castillo Molleda)

Ganó la abstención dirán los que la promovieron, ganó la democracia dirán los que participaron, lo cierto es que perdió Venezuela.

Los resultados confirman la muerte del sistema electoral venezolano nuevamente impugnado por un candidato. La fatiga se comprobó en los simpatizantes del gobierno y en quienes se les oponen, la política en Venezuela se encuentra en terapia intensiva por lo que costará mucho recuperar la confianza en los electores. Los problemas económicos asfixian al pueblo, en pocos días cuando todo se ponga peor los promotores de la abstención serán olvidados por no cumplir y los que apoyaron al gobierno se sentirán mas frustrados y decepcionados. Veremos el comportamiento de la comunidad internacional si sigue en su juego de micrófono o si será capaz de actuar. En caso de seguir la guerra de micrófonos la frustración será peor.

Para el gobierno las excusas se acabaron o le dan solución al tema económico o su permanencia en el poder se verá  comprometida a corto plazo, siendo su principal amenaza sus aliados políticos.

El conflicto interno entre los que se identifican chavistas contra los que se identifican maduristas podría ser el inicio de un proceso de negociación interna, el cual podría desencadenar hechos similares a lo ocurrido en Honduras con Zelaya en el 2009 y en Paraguay con Lugo en el 2011, en el que los mismos aliados políticos al gobierno negociaron sus salidas.

Los venezolanos buscaran trasladarse a otros países convencidos que ya no se puede hacer nada y la  desesperanza traerá depresión colectiva.

Con este escenario será necesario un reencuentro en los sectores que se confrontaron entre votar o no votar, les toca pasar la página y seguir, pero los voceros políticos tendrán que ser sustituidos por personas que gocen de credibilidad  para lograr retomar la confianza.

En el país se hace necesario hacer un inventario actualizado de los sectores productivos activos y definir cuáles de esos sectores seguirán apostando al país.

Una vez que el C.N.E dió el primer boletín de resultados en el que anunció como ganador al presidente Maduro con 5.823.728 votos seguido de Henri Falcon con 1.820.552 votos,  Bertucci  925.042 votos, Quijada 34.614, con una participación del 46.1%, en vez de haber un ambiente de alegría y celebración lo que se sintió  fue un rotundo silencio en señal de tristeza y cómo no iba a haber tristeza si todo seguirá igual.

Los elevados niveles de incertidumbre harán muy inestable el futuro político, económico y social, por lo que solo los más hábiles lograran sobrevivir al holocausto. El país debe entrar en una profunda  reflexión y todo lo que se haga debe ser debidamente estudiado y pensado para no seguir repitiendo los mismos errores.

El presidente promete de nuevo Diálogo, gobierno de calle, nada nuevo así que no serán muchos los cambios positivos que se verán. Muy lamentable que Henri Falcón haya realizado esa triste declaración antes de la emisión de los resultados. Los buenos soldados deben saber ganar y perder y si tiene pruebas de fraude que las presente, no le quedó bien rendirse antes.

Igual o peor fue el pobre discurso emitido por Maduro al conocerse los resultados que no levantó emociones.   Cómo lo dijo Bernardo Urrutia “Cuando un pueblo se siente triste del triunfo de un candidato es señal que el candidato carece de liderazgo”

Jesús Castillo Molleda/ (Politólogo, Profesor, Emprendedor, Locutor).