jueves 28 de marzo de 2024

#OPINIÓN Concreción del acuerdo (Francisco J. Arias Cárdenas)

La libertad de políticos procesados por diversas causas, la incorporación de los diputados del Gran Polo Patriótico a la Asamblea Nacional, los pasos iníciales, para la reconformación del CNE, son muestras concretas del avance del diálogo con resultados que se inició una semana antes de la Asamblea General de Naciones Unidas.

Necesitamos avanzar en las demás propuestas que están sobre la mesa, pero es urgente hacerlo sin demora. Lo exige el sufrimiento de la gente común de la patria nuestra. Lo requiere el país para que podamos vivir como seres humanos, con dignidad y decoro, en una patria llena de posibilidades y requerida del entendimiento entre sus hijos. 
La situación de confrontación y la intervención foránea, único camino que promueve la oposición radical, mostró en Nueva York que no tiene la fuerza ni el apoyo mundial para concretar la torpe solución que proponen estos extremistas. Latinoamérica unida despierta con países hermanos que no apoyan la implementación del TIAR, intervencionismo que deja de lado la construcción de un continente nación como lo soñó el padre Libertador. 
El entendimiento que pasa por incorporarse al diálogo de Caracas o integrar la sensatez de los voceros de la oposición que se expresaron recientemente en el promovido por Oslo, Noruega, nación que ha ejercido como facilitador de diversos procesos de diálogo en las últimas décadas.
Desempantanar el diálogo, nacionalizarlo, sacar el interés y la presión norteamericana para lograr concretar en respeto todas las acciones que nos permitan recuperar la senda del crecimiento económico, de la vía en paz hacia la prosperidad. 
Pasado el escenario de ONU, con venezolanos sin representación real y constitucional, llevados de la mano de otros países fueron a decir fuera lo que deben acordar dentro; es tiempo de regresar de inmediato a la sindéresis.
En el diálogo que se inició y que está encaminado, debemos incluirnos todos y ese es el escenario para solucionar la situación desesperada de nuestro pueblo.
NAM/Francisco J. Arias Cárdenas/[email protected]