El secretario general nacional del partido Unidad Visión Venezuela y diputado por el estado Miranda en la Asamblea Nacional, Omar Ávila, analizó la situación económica y social del país comenzando por la hiperinflación.
«La hiperinflación no surge de ninguna guerra económica, sino de la ignorancia de quienes decretan el gasto público sin tener cómo pagarlo”, dijo Ávila.
Explicó que con la crisis que se observa en Venezuela, la hiperinflación sigue aumentando, así como el control y la dependencia del gobierno sobre la mayoría de los venezolanos».
Ávila dijo que el Mandatario habló de tres factores de corrección que incluye alimentos, higiene y salud pero obvió el único y verdadero factor de corrección que no es otro que no hablar más del incremento del precio de la gasolina. Destacó también que el anuncio gubernamental de un nuevo aumento de sueldo se establece sin dictar ninguna medida de protección del salario; tampoco se incentiva la producción y menos aún, hay un plan para recuperar la economía y frenar la hiperinflación «y esta nueva devaluación de la moneda que alcanza el 150%”.
A su vez, a que el salario fijado hace apenas una semana de 4.500 BsS y que al momento del aumento era 9$, hoy ya es menos de 8$, por lo que recordó que cuando se decretó el salario mensual en 1.800 BsS, este equivalía a 30$ mensuales; en ese sentido no se justifica hablar de una recuperación económica.
Según Ávila, en 100 días de haberse implementado el «plan Maduro«, se tiene más depreciación de la moneda y del poder adquisitivo, más inflación y por ende mayor contracción del consumo y de la actividad económica. “Es obvio que los trabajadores cada día están más pobres, y que hay una mayor dependencia de la población a los repartos subsidiados del gobierno, quien por esta razón, por ahora aumenta su control social.
Con el análisis se deduce su preocupación por la ley de alimentación porque el gobierno ratifica el precio del cesta ticket en el 10% del salario, violando así lo que dice su misma ley. En ese sentido destacó que “los precios acordados son pura ficción. No existen. Al punto que en el único lugar donde se consiguen todos los productos a precios regulados es en la Gaceta Oficial».
NAM/2001
