Un bote de aguas que tiene más de un año sin ser atendido, le tiene la vida triste y hecha cuadritos a los habitantes de la urbanización San Miguel de la parroquia Francisco Eugenio Bustamante en Maracaibo.
A través de nuestro servicio de mensajería nos hacen llegar gráficas del estado en que se encuentra la vía, que poco a poco se ha ido deteriorando ante la mirada silente de los organismo encargados, que no han atendido a tiempo este problema y que genera insalubridad ambiental, vial y peor aun contribuye al deterioro de los vehículos que transitan por la zona.
«En la urbanización San Miguel, al lado del estadio Edgar Ferrer y el ambulatorio San Miguel, tenemos casi un año con un bote de aguas negras que ha destruido la Avenida, lo que prácticamente impide el paso», denuncia este vecino y agrega que ya casi no tienen por donde pasar.
NAM