El comandante Estratégico Operacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), Almirante en Jefe, Remigio Ceballos, rechazó este miércoles el informe presentado por el secretario General de la OEA Luis Almagro sobre presuntas pruebas de delitos de lesa humanidad cometidos en Venezuela.
Durante el acto de juramentación de lealtad al presidente Nicolás Maduro, por parte de funcionarios del Ceofanb el almirante Remigio Ceballos sostuvo que el mayor delito de lesa humanidad lo comete el al meterse con los venezolanos.
“Es un delincuente (Luis Almagro), puede decir lo que quiere no creemos en lo que el dice”.
Aclaró que Venezuela tiene unas leyes, un código de justicia militar, una Constitución y todo “aquel que este al margen de la Ley debe atenerse a las consecuencias”.
Militares detenidos
También el alto vocero castrense confirmó que durante los últimos días se han efectuado detenciones militares por presunta traición a la patria.
“Los que se han ido, no quieren estar porque no les da la gana de estar aquí, pues pueden irse, somos un estado libre y soberano”, precisó.
Pero agrega que estas personas se van y comienzan a utilizar las redes, “no le tenemos miedo, solo le decimos que a lo que pongan un pié en veenzuela los vamos a capturar”.
Además advierte que los países aliados donde seencuentren también los entregarán a la justicia venezolana.
Diálogo en puertas
El almirante Ceballos, indicó que el Ceofanb está dispuesto a apoyar estratégicamente con los intentos de diálogo entre gobierno nacional y oposición.
Esto en relación a los encuentros que adelanta el Gobierno con sectores opositores tras la reelección del presidente Nicolás Maduro el pasado 20 de mayo.
Expertos de la OEA presentaron un informe que devela presuntamente que soldados y paramilitares vinculados al Gobierno habrían asesinado al menos 131 venezolanos en las protestas del 2014 y el 2017.
Igualmente se le suman cerca de 8,300 ejecuciones extrajudiciales, lo cual les permite concluir que se trata de crímenes de lesa humanidad.
Paralelamente el documento presentado a la OEA asegura que hubo más de más de 12,000 detenciones arbitrarias. Igualmente el uso recurrente de la tortura e identifica más de 1,300 presos políticos.
NAM/Venesisión
