jueves 28 de marzo de 2024

¡MOVIMIENTO ‘SEASTEADING’! Monta una casa ‘soberana’ en el mar y ahora afronta la pena de muerte en Tailandia

Cuando al comerciante de bitcoins y especialista en tecnologías de la información Chad Elwartowski, de 46 años, le propusieron participar en un proyecto de seasteading , el movimiento que promueve vivir en a guas internacionales para librarse de las leyes de cualquier país, poco se imaginaba que acabaría afrontando lapena de muerte por instalar su hogar en medio del mar.

Este ciudadano estadounidense y su novia tailandesa, Supranee Thepdet, se instalaron durante dos meses en una cabina octogonal de dos pisos y seis metros de ancho, enganchada a un mástil que se erigía a 16 kilómetros de la isla tailandesa de Phuket, en el Mar de Andaman.

Cuando al comerciante de bitcoins y especialista en tecnologías de la información Chad Elwartowski, de 46 años, le propusieron participar en un proyecto de seasteading , el movimiento que promueve vivir en a guas internacionales para librarse de las leyes de cualquier país, poco se imaginaba que acabaría afrontando lapena de muerte por instalar su hogar en medio del mar.

Este ciudadano estadounidense y su novia tailandesa, Supranee Thepdet, se instalaron durante dos meses en una cabina octogonal de dos pisos y seis metros de ancho, enganchada a un mástil que se erigía a 16 kilómetros de la isla tailandesa de Phuket, en el Mar de Andaman.

Si bien la estructura ha sido considerada un hito para el movimiento que construye comunidades flotantes como una forma de explorar gobiernos alternativos, las autoridades de Tailandia han acabado desmantelandola después de acusar a la pareja de poner en peligro la soberanía del país, un delito punible con cadena perpetua o la muerte.

Cuando la marina tailandesa llegó a la residencia para desmantelarla el 13 de abril, la pareja ya había huido. Se desconoce su paradero, aunque el gobierno tailandés cree que la siguen en Tailandia.

“Esto es ridículo”, afirmó Elwartowski en una declaración publicada en internet. “Vivimos en un bote flotante durante unas semanas y ahora Tailandia quiere que nos maten”. “Todavía estamos bastante asustados por nuestras vidas. En serio, no creíamos que estuviéramos haciendo nada malo”, dijo el estadounidense a la agencia The Associated Press. La pareja defiende que su casa estaba anclada fuera de aguas territoriales tailandesas.

Cuando al comerciante de bitcoins y especialista en tecnologías de la información Chad Elwartowski, de 46 años, le propusieron participar en un proyecto de seasteading , el movimiento que promueve vivir en a guas internacionales para librarse de las leyes de cualquier país, poco se imaginaba que acabaría afrontando lapena de muerte por instalar su hogar en medio del mar.

Este ciudadano estadounidense y su novia tailandesa, Supranee Thepdet, se instalaron durante dos meses en una cabina octogonal de dos pisos y seis metros de ancho, enganchada a un mástil que se erigía a 16 kilómetros de la isla tailandesa de Phuket, en el Mar de Andaman.

Si bien la estructura ha sido considerada un hito para el movimiento que construye comunidades flotantes como una forma de explorar gobiernos alternativos, las autoridades de Tailandia han acabado desmantelandola después de acusar a la pareja de poner en peligro la soberanía del país, un delito punible con cadena perpetua o la muerte.

Cuando la marina tailandesa llegó a la residencia para desmantelarla el 13 de abril, la pareja ya había huido. Se desconoce su paradero, aunque el gobierno tailandés cree que la siguen en Tailandia.

“Esto es ridículo”, afirmó Elwartowski en una declaración publicada en internet. “Vivimos en un bote flotante durante unas semanas y ahora Tailandia quiere que nos maten”. “Todavía estamos bastante asustados por nuestras vidas. En serio, no creíamos que estuviéramos haciendo nada malo”, dijo el estadounidense a la agencia The Associated Press. La pareja defiende que su casa estaba anclada fuera de aguas territoriales tailandesas.

Las autoridades tailandesas alegan razones de seguridad. “Esto afecta nuestra seguridad nacional y no se puede permitir”, señaló el martes el contralmirante Wintharat Kotchaseni a los medios tailandeses. Además, también argumentó que la casa flotante también representaba un peligro para la navegación si se soltaba del mástil.

Movimiento seasteading

Detrás de la controvertida idea hay varios promotores. Para empezar, sus constructores: el grupo Ocean Builders, quien financió y promocionó la iniciativa como un proyecto piloto que serviría para inspirar futuras comunidades flotantes y vender a la larga más unidades.

El término seasteading –contracción de sea (mar en inglés) y homesteading (colonización)– apareció por primera vez en un libro publicado en 1981, pero ha tenido un renacimiento en los últimos años, ya que la ideas de vivir de forma alternativa de la interferencia del estado, ligada también al uso de la criptomoneda bitcoin, se han vuelto más populares, incluso entre figuras influyentes de Silicon Valley, como el cofundador de PayPal, Peter Thiel.

“Lo primero que puedo hacer es todo lo que pueda para ayudar a Chad y Nadia, porque vivir en una estructura autoconstruida extraña y soñar con la soberanía futura debe ser considerado como excentricidades inofensivas, no crímenes importantes”, apuntó en su página de Facebook Patri Friedman, ex ingeniero de Google que dirige el Instituto Seasteading. Su presidente también defendió el proyecto y lo consideró un hito para el movimiento. La pareja “demostró que una sola familia puede flotar de manera estable en aguas internacionales por menos del costo del hogar estadounidense promedio”, afirmó Joe Quirk en un comunicado.

La Vanguardia