martes 23 de abril de 2024

¡MONSTRUOSIDAD RESUELTA! EL CICPC LO CAPTURA: Joven de 18 años abusa sexualmente y estrangula a su vecino de 11 años

La comunidad de la Cuarta Etapa de la urbanización Altos del Sol Amado sigue estupefacta tras conocerse una monstruosidad cometida por uno de los miembros de la comunidad contra su vecino, un pequeño de apenas 11 años de edad a quien le fue arrebatada la vida luego de haber sido abusado sexualmente.

El aberrado se trata de otro jovencito apenas entrando a la mayoría de edad y del cual solo se le conoce su apodo “El Yiyi”, de 18 años. Todo ocurrió en el mismo perímetro de la zona residencial en horas de la noche del pasado miércoles, 7 de julio.

El pequeño Fabier Meza no había regresado a su casa, razón por la cual, sus papás se preocuparon y en compañía de otros vecinos comenzaron a buscarlo por los alrededores. Unos vecinos, contaron a la policía, fueron quienes avistaron, entre unos árboles el cuerpo sin vida del niño de 11 años y desde entonces se encendieron las alarmas en todo el sector. Aquella noticia cayó como una bomba, nadie salía de su asombro y lo peor era que no sospechaban de nadie en particular.

Criminalística entra en acción

Como el rayo llegaron a la escena los funcionarios de la Unidad de Investigaciones de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalística (CICPC) cuya sede está justo al lado de la urbanización.

No pasó mucho tiempo para que dieran con el asesino. Su accionar fue torpe y estúpida, de modo que fue sencillo dar con él y se trata nada menos que de un vecino de la víctima, el ya referido “Yiyi”.

La mamá lo interrogó

Ese día, miércoles por la noche, una vez que violó y estranguló con sus propias manos al muchachito, “El Yiyi” llegó a su casa todo sudado y embarrialado.

Su madre al mirarlo en tales condiciones se sorprendió y le preguntó la razón por la cual él estaba tan sucio, a lo que el muchacho se limitó a decir “Me robaron mamá”.

El muchacho se metió a la ducha y se enconchó en su casa de donde no quiso salir más. No pasaron 48 horas cuando Criminalística tocó a la puerta de la vivienda preguntando por él.

Bajo engaño

Fabier conocía a su asesino, eran vecinos y de vez en cuando se topaban en la calle, en la cancha, donde solían verse los muchachos. Así que “El Yiyi” aprovechó esa circunstancia para planificar el maltrato hacia el niñito.

Su mente retorcida y depredadora ya se había fijado en Fabier y era solo cuestión de tiempo para fraguar su plan.

Lo llamó y lo convidó a jugar en la cancha. Los detectives presumen que ya “El Yiyi” sabía lo que iba a hacer y como lo iba a hacer.

Una vez en la cancha, bajo engaño con algún pretexto, lo apartó de la cancha y se lo llevó hacia un lugar contiguo donde estaban unos matorrales que se situaban en una especie de desagüe o de pequeño precipicio.

Allí fue donde lo abusó y luego, seguramente cuando Fabier intentó luchar por evitar la violación y salvar su vida, “El Yiyi” lo asfixió con sus manos y luego huyó del lugar dejando tirado al niño en ese barranco.

Se investiga la posible participación de otro menor que habría prestado colaboración a “El Yiyi” en la macabra ejecución.

No fue nada difícil para Criminalística dar con el homicida, siendo que dejó todas sus huellas y su ADN en el cuerpecito del menor violado y asesinado, a cuyo cadáver se le practicaron todas las experticias correspondientes que condujeron a los detectives al homicida en un periquete.

Trascendió –no se ha confirmado- que “El Yiyi” sería hijo de un policía del Estado.

NAM