En el momento que alcanzas el punto de excitación en la relación sexual, el aumento de las hormonas te provoca una especie de anestesia natural. Por lo que es más fácil atreverse a realizar forcejeos en la práctica. Tal es el caso, de las nalgadas, mordidas y desde luego, los chupetones. No obstante, son un peligro en el sexo.
En el mundo de la medicina se le conocen como hematomas, que se generan desde el momento que hay una succión de la piel con la boca. No, no se trata solo de algo superficial, la apariencia queda de lado, pues al final de cuentas hasta puedes cubrirlos con maquillaje.
De hecho, hay hombres y mujeres que realizan esta práctica para marcar territorio. Una manera posesiva de gritarle al mundo que esa persona les pertenece. Pero, ¿qué sucede a nivel físico? Al succionar con fuerza o realizar leves mordidas, los capilares se rompen. Particularmente los también conocidos hematomas, en la zona de los muslos y el cuello tienden a marcarse más.
A nivel interno la sangre se filtra en los vasos y al inicio adquiere un tono verdoso o lila. Posteriormente, el cuerpo vuelve a absorber la sangre y es cuando desaparece.
Esto es solo cuando hablamos de casos leves, pues hay chupetones tan intensos que gravemente pueden formar coágulos de sangre, los cuales a su vez causan parálisis porque van al corazón.
¿CÓMO PUEDO QUITARLOS?
En primer lugar, toma en cuenta que los chupetones se reducen con ayuda de lo frío. Particularmente una bolsa de hielo o una cuchara por unos minutos en la zona te ayudan. Es muy importante que no te pases más de 15 minutos porque puedes quemar la piel.
Posteriormente, puedes pasar un cepillo de cerdas suaves. Esto para que mejore la circulación. Basta con pasarlo en forma circular.
En caso de que quieras algo más seguro, en la farmacia hay muchos productos que disminuyen la hinchazón.
NAM/Soy Carmín
