El Congreso peruano aprobó el jueves cuatro reformas constitucionales impulsadas por el presidente Martín Vizcarra con las que busca, según afirma, desinfectar el sistema político y judicial corroído por denuncias de corrupción.
La aprobación se alcanzó por unanimidad y al tope de la fecha límite acordada, en medio de advertencias del presidente peruano sobre la posibilidad de clausurar el Parlamento si el aval no se lograba. Las reformas, cuatro en total, deben ser sometidas a un referendo en diciembre.
El paquete incluye una reforma del Consejo Nacional de la Magistratura, órgano rector de la justicia que en adelante podría llamarse Junta Nacional de Justicia. Las enmiendas establecen el retorno al sistema de dos cámaras legislativas, la no reelección inmediata de parlamentarios y toca el tema del financiamiento de las organizaciones políticas.
Si tales reformas son apoyadas mayoritariamente por los peruanos en la consulta prevista para el 9 de diciembre, el nuevo Parlamento estaría integrado por 130 diputados y 50 senadores, quienes actuarían por cinco años.
Vizcarra había lanzado un mensaje a la poderosa oposición parlamentaria: o le ayudaban a impulsar reformas claves para desinfectar el sistema político y judicial golpeado por la corrupción o no tendría contemplaciones en usar sus poderes constitucionales para cerrar el congreso, el más desprestigiado de los últimos 25 años, según los expertos.
NAM/AP
