miércoles 3 de julio de 2024

Leocenis García: La oposición no aprende, y fortalece al Gobierno

 

Correo: [email protected]

Una de las más graves carencias de la oposición con respecto al gobierno de Nicolás Maduro es su probada incapacidad para aprender de sus errores y rectificar. Pero, su más enorme confusión es no entender la naturaleza del actual régimen. Para la oposición, el chavismo y los militares son dos cosas distintas. Ellos, aún piensan que saldrán unos ” nobles” militares que se le insubordinarán a Maduro. Y eso no es verdad.

Allí está el ejemplo de la catástrofe en la que está  terminando la valiente y noble rebelión de los ciudadanos  que quieren un cambio del modelo colectivista interventor que ha arruinado a Venezuela.  Se ha prometido la salida del gobierno, a piedra y trancando calles. Los políticos tradicionales (Freddy  Guevara y Julio Borges, los más emblemáticos),  han dicho que no es la vía electoral sino la fuerza  lo que cambiará el panorama.

Pues bien, la fuerza no ha resultado, y lo que es peor, no ha producido las sanciones y rectificaciones que del lado de la oposición han debido concretarse en acciones sancionadoras y de repudio a todo lo que han hecho. Por el contrario insisten, y vuelven a llamar a un pueblo con hambre a tragar gas, y poner los muertos. No he visto un solo detenido que sea hijo o pariente de los convocantes.

En mi opinión esta clase de Unidad, ya se está volviendo peligrosa. Lo que no se hace y se ha debido hacer está por encima de la solidaridad de la coincidencia circunstancial de la oposición a Maduro, la cual está siendo secuestrada en mala hora y con malas artes.

Existe detrás de todo este error, que nos aparta de lo único a lo que Maduro, realmente le tiene miedo: la vía electoral; unos intereses en los que la codicia y las ambiciones bastardas de un sector de los boliburgueses (bolichicos y compañía) copuló impúdicamente con el oportunismo de un puñado de aventureros sin principios que quisieren beneficiarse del repudio que el país siente por el gobierno.

La MUD no puede ser culpable de esta  catástrofe. Es más, se creó para evitar que semejante cosa volviera a suceder, es decir, que se buscara la vía mágica, la anti-política y la violencia como vía de lucha. Cosas que en el pasado, siempre fortalecieron al gobierno.

Sin embargo, muchos de quienes hoy están ahí, tienen culpas y responsabilidades que han debido purgar y no purgaron, que han debido ser veto para evitar que su presencia y sobre todo su mentalidad, contaminara lo que nació para coordinar las acciones de la enorme rebelión civil venezolana, no para apropiarse de ella y querer repetir los errores del pasado.

Así como Pérez Recao, se apoderó de quienes tomaron el poder el 11 de abril, ahora los bolichicos Alejandro Betancourd, los Nervis Villalobos, los Raul Gorrin, secuestraron a varios de esos dirigentes que ahora llaman al caos demencial.

La segunda catástrofe,  que tenemos al frente, es la idea que ha surgido de esto grupos económicos que antes estaban ligado al chavismo de un paro llamado “cívico” que se inicie en los próximos días, que nadie aprobó, y que nadie parece tener el coraje de hacer algo eficaz y enérgico para detener la irracional dinámica que cobraría.

La alianza opositora está siendo desplazada por dos organizaciones que son parte de ella, pero son autónomas: Voluntad Popular y Primero Justicia. El resto de los partidos, están ahí, sin coraje arrastrados como una débil paja, por estos muchachos.

Las dos arrastran a la oposición a un esfuerzo suicida y extemporáneo. Sin embargo, la responsabilidad de cada uno no es pareja.

Primero Justicia acabó con la atención en la Asamblea Nacional que mantuvo Henry Ramos, Borges no ha terminado de sacar a la AN del lío en que está. Y Voluntad Popular no ha resuelto políticamente, cosa que se ha podido la prisión de su líder, Leopoldo López. Quedándose fuera del juego real.

Los errores se han premiado. El error más grave, sí es a plenitud de la MUD y, está dentro de ella, y es el empeño del gobernador Capriles, de hacernos sufrir con él, su incapacidad para defender su triunfo. Capriles no nos puede hacer pagar su incapacidad de ser Presidente.

Ha llegado la hora de pedir que se rectifique y se le sancione. La posposición del referéndum revocatorio, por el error de haber insistido en presentar unas firmas  a destiempo, con una pelea interna con AD, UNT, y VP, que se sabía no se podía hacer sin un acuerdo con la Unasur y el Vaticano, le ha hecho ganar al Gobierno lo que la oposición no ha debido perder jamás: tiempo. La MUD está indisolublemente ligada a la persona del gobernador Capriles.

Ese no fue su propósito inicial, ni debe ser su función. Pero lo es. En política, los errores se pagan. La  MUD  debe ser desmantelada, clausurada y disuelta. Si no se hace así, las posibilidades de que Maduro se salga con la suya y se quede en el poder por encima de la voluntad mayoritaria de quienes quieren votar para revocar su mandato, son muy altas.

Ahora, bien, los militares no han aparecido , ni aparecerán. Y ahora Guevara y compañía, ordenan “tomar la calle” para marchar en protesta e intentar lograr con presiones tumultuarias, lo que ha podido lograr si hubiera hecho bien lo que se debído hacer: Negociar, llegar a un acuerdo político.

Pero Guevara llama a protestar. ¿En protesta de qué?, ¿de su torpeza?, ¿de su terquedad?, ¿de su arrogancia? La lección  de estos días no se ha aprendido.

Quiero aclarar que antes de escribir este artículo, hace una semana le escribí un mensaje a Guevara y brevemente le manifesté mi preocupación por la decepción que provocaría la marcha del 19A.

La oposición si se quiere salvar debe decirle la verdad al país:  1) es inevitable, maniobrar que se den  las elecciones de gobernadores y alcaldes este año 2) El revocatorio murió, y ya es inicio que se celebre ahora en 2017 o el año que viene ,  pues en este caso, el vicepresidente finaliza el período.

Pero el colmo del ridículo es que Maduro termina su mandato el año que viene.

Nv1/Opinión