El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha acudido este 31 de diciembre a la ciudad rusa de Magnitogorsk (provincia de Cheliábinsk), donde esta mañana se derrumbó parcialmente un edificio residencial a causa de una explosión de gas.
La tragedia le ha costado la vida al menos a cuatro personas, mientras que otras 35 siguen desaparecidas.