El Nou Estadi de Tarragona ha sido el escenario del tan cacareado encuentro entre el rey Felipe VI y el presidente de la Generalitat, Quim Torra. El monarca y el president, con visible rostro serio, han compartido palco en la inauguración de los Juegos Mediterráneos que han dado este viernes el pistoletazo de salida en la ciudad tarraconense. Ubicado entre ambos ha estado presente el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Al otro lado del Rey se ha posicionado el presidente del Comité Internacional de los Juegos Mediterráneos, Amar Addadi. También ha estado presente la ministra de Política Territorial y Función Pública, Meritxell Batet.
Mientras las autoridades han ido ocupando su lugar en el palco ha sonado primero el himno de Catalunya, Els Segadors, y después, el himno de España, La marcha real, con algunos tímidos silbidos de fondo. Instantes después ya ha dado comienzo la inauguración de los Juegos en un semivacío Nou Estadi.
La cita ha sido una incógnita hasta este mismo viernes, dado que el presidente de la Generalitat no ha confirmado su asistencia hasta horas antes del evento. El motivo, manifestar su disgusto por el discurso del Rey el 3 de octubre. Con todo, y pese a anunciar que el Govern corta toda relación institucional con la Casa Real, Torra ha acabado desplazándose hasta Tarragona.
Antes de su salida al palco, en el interior del estadio, el president ha entregado al jefe de Estado un informe elaborado por el Síndic de Greuges de Catalunya sobre las consecuencias del referéndum –prohibido por el Tribunal Constitucional– y la posterior aplicación del artículo 155 de la Constitución: La vulneración de derechos fundamentales y libertades públicas con ocasión de la reacción penal al 1-O y la aplicación del artículo 155. Junto al texto del defensor del pueblo, Torra también ha entregado al Rey el libro Dies que duraran anys (Días que durarán años), volumen que recoge imágenes del convulso otoño catalán publicado por el periodista y fotógrafo Jordi Borràs. “Quiero que le quede claro qué pasó en Catalunya el 1-O, porque nosotros no lo olvidaremos jamás”, ha justificado. El ejemplar incluye una dedicatoria del autor en la que Borràs escribe que “no habrá estirpe, ley, ni patria que pueda frenar el anhelo de libertad del pueblo catalán”.
Un par de horas antes de su encuentro con Don Felipe, Quim Torra ha visitado la concentración de protesta contra la llegada del Rey que la ANC y Òmnium ha llevado a cabo en Tarragona. Allí, bajo gritos de “ni un paso atrás” de los presentes, el líder del Executiu catalán ha vuelto a pedir que el monarca se disculpe “por haber enviado la policía a zurrar a catalanes el 1-O”.
La Vanguardia
