Dos limusinas blindadas Aurus de fabricación rusa, pertenecientes al proyecto Kortezh, participaron junto con otros vehículos especiales en unas competiciones de maniobras de velocidad que se celebraron esta semana en un campo de entrenamiento del Servicio Federal de Protección en la provincia de Moscú. Dieciséis pilotos demostraron sus habilidades profesionales.
El proyecto Kortezh (‘cortejo’, en ruso) arrancó en el 2012 y contempla el desarrollo de una familia de vehículos con funciones especiales: una furgoneta, un sedán de clase empresarial y una limusina para las altas personalidades del Estado, así como un todoterreno para sus guardaespaldas.
