sábado 4 de mayo de 2024

Hoy se decide en audiencia el futuro de Ricardo Martinelli en Miami

Ricardo Martinelli acudirá hoy frente al juez Edwin Torres de la Corte del Distrito Sur de La Florida para definir si la evidencia criminal que presentó Panamá en su contra se circunscribe a los tratados de extradición firmados entre Panamá y Estados Unidos en 1904.

Martinelli es requerido en Panamá por cuatro cargos, interceptación ilegal de las comunicaciones sin autorización judicial, persecución y seguimiento sin la debida autorización judicial, y malversación de fondos en dos de sus formas.

El acto no será un juicio contra el expresidente, sino la presentación de los argumentos de las partes. La Fiscalía, representada por Adam Fels, y la defensa, compuesta por un nutrido grup o de abogados, que tratarán de convencer al juez sobre sus planteamientos, y si lo consideran prudente, llamar al estrado a sus testigos.

Martinelli ha sufrido varios reveses: la Corte no acogió el desistimiento del caso que presentó la defensa, tampoco le han resultado las jugosas ofertas o paquetes millonarios de fianza para lograr su excarcelación.

Detenido en la prisión federal del Sur de Miami (Florida), desde el 12 de junio, las alternativas de la defensa se reducen cada vez más para evitar su extradición, que de ser aprobada por la Corte del Distrito Sur, será responsabilidad del Departamento de Estado, al igual que el tiempo que pasará en prisión Martinelli mientras se cumple el proceso.

El último recurso -un habeas corpus ante el Tribunal Supremo- presentado por dos letrados penalistas de renombrada reputación, David O. Markus y Ricardo Bascuas, fue negado por el juez Clarence Thomas, uno de los magistrados más conservadores del tribunal de la Corte Suprema de EE.UU..

Con este panorama, los escenarios de sus abogados se reducen a probar en la audiencia que su cliente es verdaderamente un perseguido político, como lo ha querido parecer desde que solicitó asilo al gobierno norteamericano en julio de 2015, y que la nutrida sustentación presentada por el fiscal Adam Fels no cumple con los requisitos o no es lo suficientemente sólida, para considerar la extradición.

CARTAS A FAVOR

La defensa presentó el lunes cinco breves cartas de ciudadanos de distintas nacionalidades en las que avalan ‘la honradez, bondad y filantropía’ de Martinelli, con la intención de convencer al juez sobre los principios morales de su cliente. Una de ellas es del reverendo Martin Añorga, que admite no conocer personalmente a Martinelli, pero expresa su solidaridad ‘como cubano agradecido’ con todos los que se solidarizan con la lucha por la libertad de su patria.

La más reciente misiva es la del alcalde de la ciudad de Miami, Tomás Regalado, quien aboga, tal vez ya de forma infructuosa, para que se le conceda una fianza a Martinelli, ‘quien se encuentra delicado de salud y requiere esperar la decisión de la Corte en casa, acompañado de su familia’, escribió Tomás Regalado.

El catedrático Jaime Thorton, por ejemplo, declaró que Martinelli ha impactado positivamente en la vida de niños y profesores, recalca el amor por la educación que ha demostrado Martinelli y su respaldo a la Legión de Honor Sigma Nu, desprendiéndose de más de $150,000 anuales para becas para los niños.

Otra carta es la de Segundo Antonio Salazar, ciudadano venezolano, publicista, escritor, residente en Miami, quien declara conocer al expresidente ‘de vista’ desde que era candidato a la presidencia y luego como exitoso presidente de Panamá. ‘Es un hombre trabajador, honesto, que honró su posición y atento a las necesidades de las comunidades que se preocupó por la salud y educación de los panameños y dio su apoyo a estudiantes y atletas’, asegura.

La quinta carta es de Iván Feris, colombiano residente en Florida desde hace dieciséis años, que ha conocido a Martinelli durante treinta años y, como amigo, es su ‘obligación moral’ expresar su apoyo a Martinelli en estos tiempos difíciles. ‘Es un hombre de principios, integridad y devoto a ayudar a otros. He sido testigo, en numerosas ocasiones de ver cómo Martinelli ayuda a otros y se involucra en el bienestar de la comunidad’. apunta.

¿QUÉ VALORA LA CORTE?

La Corte debe determinar si certifica al Departamento de Estado que la evidencia sometida por Panamá es suficiente para sostener los cuatro cargos contra Martinelli. Una vez se complete la documentación, la Corte deberá falla en cuanto a la admisibilidad. Deberá pronunciarse en cada uno de los elementos sobre los cargos por los que se le solicita la extradición. Una vez efectuado este paso, deberá presentarlo al Departamento de Estado con una copia de los testimonios que se presenten en la Corte, si es que hay alguno, y estará a cargo de la custodio de Martinelli mientras se determina su extradición o se deniega.

La Fiscalía considera que las evidencias presentadas por Panamá son sólidas y se ajustan a los requerimientos de la extradición. Ninguno de los recursos presentados por la defensa desvirtúa la legalidad en que se enmarcan las pruebas de la fiscalía dentro del tratado bilateral. Por tanto, esta Corte debe certificar al Departamento de Estado que Martinelli es extraditable a Panamá y presentarse ante los tribunales por los cuatro cargos que se le acusa.

EVIDENCIA EXTEMPORÁNEA

La defensa de Martinelli argumentó que la declaración jurada de Ismael Pittí, exfuncionario del Consejo de Seguridad Nacional, se introdujo en el expediente a destiempo. En reciente conferencia de prensa, los abogados de Martinelli advirtieron que demandarían a la asistente legal de la oficina de Inteligencia del Departamento de Estado, Susan Benda, que declaró bajo juramento que los documentos incluidos en la evidencia contaban con la certificación correcta, pero hasta el momento no se ha conocido que hayan presentado demanda alguna contra la funcionaria norteamericana.

En este sentido, la Fiscalía rebate a la defensa al decir que la documentación contó con las certificaciones requeridas en materia consular, y se revisten de las declaraciones de Benda, quien certificó el procedimiento de acuerdo a las leyes norteamericanas.

NV1/La Estrella de Panamá