El más triste amanecer recibió una humilde familia de Propatria, en Miranda-Caracas, cuando antes de la salida del sol, su casa se convirtió en el más espeluznante escenario de sangre y horror, sin saber aun los motivos precisos un adolescente de 16 años cometió el más atroz de los crímenes en contra de su propia madre, su abuela y otros integrantes de su familia.
A través del VEN-911 del municipio Libertador se recibió una llamada alterada, que daba cuenta de la masacre que estaba ocurriendo en una residencia del sector, justo al final de la calle 10 de Propatria, en el Bloque 8, piso 5. Los vecinos que llamaron frenéticos indicaron que un joven había asesinado a su madre, a su abuela y había herido a su hermana y abuelo con un cuchillo, dejándolos tendidos en un baño de sangre.
Al momento la novedad fue pasada a los cuerpos de seguridad para que atendieron los gritos de desesperación de las personas fuera del apartamento, que no podían ayudar a sus vecinos. Al presentarse no salían de su asombro, la sala era un verdadero charco de sangre, en el suelo las dos mujeres muertes y los dos heridos quienes fueron trasladados al Hospital Magallanes de Catia para ser atendidos.
El autor material del crimen se encontraba en el lugar y presentaba heridas en el brazo derecho, los funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana lo capturaron y resguardaron mientras se recopilaban las evidencias en el sitio y para determinar que pudo haber causado tan terrible reacción en el joven que lo llevara a asesinar a su progenitora, abuela y herir al resto de sus familiares.
NAM/Con información de José Andara Rivas
