sábado 27 de abril de 2024

¡HASTA AHORA! Más de 3,7 millones de casos y más de 264.000 muertos en todo el mundo por COVID-19

El nuevo coronavirus SARS-CoV-2, que provoca la enfermedad conocida como Covid-19, ha infectado a más de 3,7 millones de personas en todo el mundo, mientras que la cifra de decesos en todo el mundo supera los 264.000 y la de los recuperados, 1.200.000.

Estados Unidos, España, Italia, Reino Unido, Alemania, Francia, Rusia, Turquía, Brasil e Irán son, en este orden, los países más afectados por la pandemia en cuanto a número de contagios confirmados y los únicos donde se ha superado la barrera de los 100.000 casos. Los diez países han adelantado a China, el epicentro original donde surgió la pandemia en diciembre de 2019.

Tan solo en Estados Unidos se han confirmado más de 1,2 millón de casos de Covid-19, es el país más afectado y con mayor número de muertes contabilizadas, más de 73.000. España, con más de 221.000 casos, es el segundo país con más contagiados, seguido de Italia, con más de 214.000; tras ellos se sitúan Reino Unido, con más de 200.000 casos y Rusia, con más de 177.000; Alemania, con más de 168.000; Francia, con más de 137.000; Turquía, con más de 131.000; Brasil, que ya supera los 126.000 infectados, e Irán, con más de 101.000.

Los desplazamientos en todo el mundo han sido cancelados mientras los negocios y la economía mundial han quedado paralizados, a excepción de las actividades consideradas esenciales. La rápida propagación del virus ha confinado a millones de personas en todo el planeta y ha obligado a imponer el distanciamiento sociale. Mientras los países de Europa empiezan a pensar en el desconfinamiento, aunque a ritmos diferentes y sin un criterio común en la Unión Europea, el foco de la pandemia de coronavirus empieza a desplazarse al continente americano.

Europa

España (221.447 casos, 26.070 muertes). Es el segundo país del mundo en contagios. El primer fallecimiento en España tuvo lugar en la Comunidad Valenciana el 13 de febrero y fue descubierto en la autopsia posterior. Una a una se han ido registrando contagios en todas las comunidades españolas, y también en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. El Gobierno pretende mantener el estado de alarma que decretó el 15 de marzo hasta al menos el 9 de mayo, pero iniciará el 4 de mayo el plan de desconfinamiento gradual y asimétrico por territorios, que durará entre seis y ocho semanas y será por faes. Los niños pueden salir a la calle bajo ciertas condiciones desde el 26 de abril, se pretende permitir salidas indviduales para pasear y hacer deporte a partir desde el 2 de mayo.

Italia (214.457 casos, 29.684 muertes). Fue el foco del brote en Europa cuando empezó a detectar casos en la última semana de febrero y es el segundo país del mundo con más víctimas mortales con coronavirus. El Gobierno italiano paralizó toda actividad, a excepción de la esencial, durante dos meses y ha prohibido entrar y salir del país. El Ejecutivo de Giuseppe Conte ha anunciado el inicio del desconfinamiento gradual a partir del 4 de mayo, cuando retomarán la actividad las empresas y se permitirán visitas familiares y funerales de hasta 15 personas. Dos semanas después, podrán abrir pequeños comercios; y la restauración hará lo propio a partir de junio, pero solo para comida para llevar.

Francia ya está entre los países del mundo con más muertos con coronavirus, al registrar 25.809 fallecidos con más de 137.000 casos. En confinamiento desde el 17 de marzo, el 11 de mayo levantará las restricciones. Todos los comercios abrirán, a excepción de la hostelería, el uso de mascarilla será obligatorio en el transporte público y las playas permanecerán cerradas al menos hasta junio, entre otras medidas.

Alemania ha superado los 7.200 muertos con más de 168.000 positivos de Covid-19. El ministro de Sanidad ha asegurado que el país, que declaró el estado de emergencia a mediados de marzo, tiene «bajo control» el brote del coronavirus.El 20 de abril, el Gobierno abrió grandes comercios, talleres, librerías y peluquerías, bajo medidas de higiene y el 6 de mayo alivió algunas medidas de restricción, pero mantiene el distanciamiento social.

El Reino Unido se ha convertido en el primer país de Europa con mayor número de fallecidos y el segundo del mundo, tras Estados Unidos. El 30 de abril, el primer ministro Boris Johnson dio por superado el pico de contagios y prometió que publicaría la estrategia de desescalada la semana siguiente. Actualmente, el país acumula 30.076 muertes y más de 200.000 contagiados, entre ellos el príncipe Carlos, que superó la enfermedad, y el propio Johnson, que estuvo ingresado en una unidad de cuidados intensivos. Mientras los países vecinos decretaban el confinamiento, el país quiso apostar por una estrategia diferente basada en la inmunidad de grupo y no decretó el confinamiento hasta marzo. Está previsto que el 11 de mayo Johnson anuncie el plan de desconfinamiento. Los expertos advierten de que podría ser el país europeo más afectado por la pandemia. De hecho, una investigación del diario Financial Times ha llegado a elevar la cifra de decesos por encima de los 41.000. 

La OMS constata situaciones dispares en Europa, pero cree que la pandemia se ha estabilizado en el continente. Mientras en algunos de los países más afectados se registra cierta mejoría de la situación (España, Italia, Francia o Alemania), en otros no descienden los contagios o incluso hay repuntes, como Reino Unido, Turquía, Ucrania y Rusia.

Rusia ha dado cuenta de más de 177.000 contagiados y más de 1.600 muertes, y su presidente, Vladimir Putin, que el 28 de marzo decretó nueve días de vacaciones obligadas en el país, ha dado vía libre a su gobierno para declarar el estado de emergencia por la pandemia. El alcalde de Moscú ha decretado el confinamiento de sus doce millones de habitantes, ciudad en la que se concentra el mayor número de afectados por esta enfermedad.

En Turquía, donde los casos superan ya los 131.000 y las muertes superan las 3.500, el Gobierno ha empezado a liberar miles de presos para descongestionar sus cárceles ante el avance de la Covid-19, causando controversia por la puesta en libertad de varios jefes mafiosos, mientras que periodistas, políticos y activistas de la sociedad civil siguen entre rejas.

En el resto de Europa, la expansión de la pandemia es relativamente elevada en Bélgica, que prevé una reapertura progresiva de comercios y escuelas a mediados de mayo; o en Países Bajos que reabrirá los colegios en mayo pero ha prohibido los eventos multitudinarios hasta septiembre. SuizaPortugal (en estado de calamidad, si bien prevé una flexibilización progresiva de las restricciones impuestas por el coronavirus), Irlanda y Suecia también acumulan miles de casos positivos.

Por su parte, la República Checa ha acelerado el levantamiento de las restricciones de movimiento al considerar que la epidemia está bajo control por la reducción de los contagios, y desde el 24 de abril permite salir a la calle y viajar al extranjero. Austria levantó el confinamiento el 1 de mayo, y sus locales de gastronomía y hostelería podrán reabrir a partir del día 15 y 29 del mismo mes, respectivamente, aunque seguirá rigiendo la obligación de mantener una distancia mínima de un metro entre las personas, así como llevar cubierta la nariz y boca en los comercios y transporte público.

América

Estados Unidos es el país más afectado del mundo y el único en el que se ha superado los 1,2 millones de contagios, con más de 73.000 muertes. La Administración Trump ha implantado diversas medidas para frenar el virus: suspendió los vuelos procedentes de Europa durante un mes, declaró la emergencia nacional para combatir el virus, en abril suspendió la emisión temporal de persmisos de residencia durante al menos 60 días. El país se convirtió el 10 de abril en el primer país del mundo en registrar un aumento de más de 2.000 muertes por coronavirus en un solo día. Apenas dos semanas después, las manifestaciones se sucedieron por varios estados en contra del confinamiento.

En Canadá, casi la mitad de todos los casos del país norteamericano están ligados a residencias de ancianos, y ese mismo es el caso de Quebec, la provincia más afectada por la pandemia. Canadá mantendrá cerrada la frontera con EE.UU. para todo tránsito que no se considere esencial por lo menos hasta el 20 de mayo para ayudar a contener la pandemia.

La Covid-19 también se ha propagado por América Latina. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) reportó que «ha habido un aumento preocupante» de la pandemia en América Latina. El país más extenso del subcontinente, Brasil, es también el más afectado. Su presidente, Jair Bolsonaro, ha optado por minimizar los efectos de la pandemia y animar a la gente a seguir trabajando, en contra del criterio y el discurso de sus colaboradores, como el ministro de Sanidad, médico y militar de gran prestigio en el país por su labor en la crisis, que fue destituido. En un clima de crispación política, con Bolsonaro responsabilizando a gobernadores y alcaldes, la crisis del coronavirus se agrava.

En el resto de Latinoamérica, destaca por su número de contagios Perú, que sigue viendo crecer las cifras hasta acercarle al límite de sus recursos. Con el sistema sanitario desbordado en algunas regiones, al país se le ha abierto un nuevo frente al registrar un gran foco de infecciones en sus hacinadas prisiones, lo que ha provocado una oleada de violentos motines para pedir medicinas y libertad.

La Covid-19 también es una amenaza en Chile, que no ha decretado confinamiento obligatorio a nivel nacional, sino un modelo de «cuarentenas selectivas o estratégicas» con restricciones semanales que revisan según evolucionen los contagios; Ecuador -en ciudades como Guayaquil se acumulan por centenares los muertos en las viviendas-; México, donde el Gobierno ha declarado la emergencia sanitaria y prolongará hasta el 30 de mayo las medidas de distanciamiento social, Colombia y Argentina, esta última en situación de aislamiento social obligatorio desde el 20 de marzo.

Asia

China, el país epicentro del brote, especialmente en la provincia de Hubei y la ciudad de Wuhan, ya no es el primero del mundo ni en contagiados ni en fallecimientos, aunque tras más de un mes en la ‘meseta’ de la curva de la evolución de la enfermedad, las autoridades llegaron a duplicar la cifra oficial de fallecidos en Wuhan. De hecho, ya ha comenzado a detectar más casos importados que de contagio local, lo que ha llevado a las autoridades a prohibir la entrada de extranjeros, a excepción de personal diplomático.

Irán es el país con mayor número de víctimas mortales en Asia después de China y el único que ha superado los 100.000 casos positivos. La mayoría de los casos se concentran en la provincia de Teherán, pero también hay en Markazí y el norte del país. Irán está teniendo problemas para importar medicamentos y equipos sanitarios y de higiene debido a las sanciones impuestas por Estados Unidos en 2018 tras retirarse del acuerdo nuclear multilateral, pero ha recibido donaciones de varios países y organizaciones internacionales y quiere obtener un préstamo del Fondo Monetario Internacional.

En Corea del Sur, la enfermedad tuvo gran incidencia inicial en febrero, pero logró contener la propagación a mediados de marzo y ahora es un ejemplo mundial de actuación temprana ante una crisis que abordó con una estrategia basada en la eficiencia tecnológica para vigilar el virus.

Japón detectó los primeros casos en el crucero Diamond Princess. El país se vio obligado a aplazar a 2021 los Juegos Olímpicos que iba a acoger Tokio este verano, aunque hay expertos que advierten de que ese plazo de un año no sea suficiente si antes no se obtiene una vacuna contra la Covid-19.

India, el segundo país más poblado del mundo, está sometido a un confinamiento desde el 25 de marzo, con el objetivo de controlar una expansión del virus que sería difícilmente asumib por sus sistema sanitario.

En la mitad oriental de Asia, destaca también la expansión de la enfermedad en PakistánFilipinas (el primer país en registrar una muerte con Covid-19 fuera de China en febrero), IndonesiaSingapur y Malasia.

La enfermedad tiene una concentración más dispar en el resto del continente. En Asia occidental, sobresale Israel, uno de los primeros países en prohibir la entrada a viajeros de España y que prevé reabrir los negocios y las escuelas en los próximos días. En esta región, son relevantes las medidas tomadas por Arabia Saudí, que ha prohibido la entrada a la Meca de peregrinos y ha cancelado el rezo diario en las mezquitas.

África

En África, el último continente en el que la Covid-19 ha penetrado, apenas quedan rincones donde la pandemia no se haya hecho presente desde que Egipto reportó el primer caso del coronavirus SARS-CoV-2, aunque el registro de casos aún no se ha disparado como en otras áreas del mundo. Este continente de 1.200 millones de habitantes no es por el momento de los más afectados por el coronavirus, pero la OMS ya ha advertido de la «preocupante tendencia al alza» en esta zona.

Según la Comisión Económica de Naciones Unidas para África (UNECA), «más de 300.000 africanos» podrían morir por la Covid-19 en un continente donde el 56 % de la población urbana se concentra en barrios marginales o viviendas informales y sólo el 34 % de los hogares tiene acceso a instalaciones básicas para lavarse las manos. Además, la crisis alimentaria en uno de los continentes más afectados por la pobreza podría llegar a duplicarse, según han advertido la FAO y el Programa Mundial de Alimentos.

A la cabeza de los contagios están Sudáfrica, Egipto, Marruecos, Argelia, Nigeria, Ghana y Camerún.

Ante las dimensiones que la pandemia puede tener en los países más pobres del planeta, la OMS admitió que el distanciamiento físico en esos lugares es «casi imposible» y pidió cautela a la hora de decretar confinamientos porque «millones de personas en el mundo deben trabajar cada día para poder poner un plato en la mesa y no pueden estar en casa un largo periodo de tiempo sin asistencia».

Oceanía

Australia, que ha registrado casi 7.000 contagios y menos de un centenar de muertes, ha empezado ya a levantar el confinamiento: si desde marzo ya funcionaban las escuelas y las guarderías, en abril se han reabierto algunas playas. Pese a todo, muchos negocios están cerrados o sus actividades restringidas, tampoco se permiten las reuniones de más de dos personas, con excepciones, y se recomienda a la población permanecer en casa a menos que se haga deporte, se acuda a una cita médica o se haga la compra.

Nueva Zelanda, que también ha logrado aplanar la curva y registra menos de 1.500 y solo 21 muertes, permite desde el 28 de abril la reanudación controlada de un 75% de actividades económicas y comerciales, además de reabrir las escuelas el 29 para los escolares que no pueden realizar sus estudios a distancia, aunque todavía siguen vigentes las restricciones a las actividades sociales y las medidas de distanciamiento físico.

NAM/RTVE