La gestión migratoria se ha convertido en el eje central de la contienda presidencial de Estados Unidos entre la vicepresidenta demócrata Kamala Harris y el exmandatario republicano Donald Trump, de cara a las elecciones del 5 de noviembre. Las propuestas sobre cómo abordar la inmigración ilegal y el control fronterizo han intensificado el debate, en medio de una retórica polarizadora.
Deportaciones masivas en el horizonte
Donald Trump ha reiterado su promesa de llevar a cabo una histórica deportación de inmigrantes indocumentados si vuelve a la Casa Blanca. Afirmó que desplegaría al ejército para perseguir a quienes se encuentren de forma irregular en el país y construiría centros de detención para migrantes. Estas medidas se basan en su promesa de ser implacable contra la inmigración ilegal.
Por su parte, Kamala Harris ha calificado estas propuestas de «retrógradas», aunque la actual administración de Joe Biden ha sido criticada por realizar un número elevado de deportaciones, superando ya el millón. Aun así, Harris ha señalado que una reforma migratoria es necesaria para modernizar el sistema.
Reforma para la ciudadanía en debate
Uno de los puntos más polémicos de las propuestas de Trump es la eliminación de la ciudadanía por nacimiento para los hijos de inmigrantes indocumentados, algo que plantea a pesar de que está consagrado en la Constitución. Además, busca eliminar el programa DACA, que ofrece protección y permisos de trabajo a los ‘dreamers’, jóvenes que llegaron de manera indocumentada a Estados Unidos cuando eran niños.
Mientras tanto, Harris ha mantenido que una reforma migratoria integral es crucial, aunque la promesa de la campaña de 2020 de otorgar la ciudadanía a los ‘dreamers’ y a millones de migrantes se ha quedado en el camino debido a obstáculos en el Congreso.
Políticas de acogida en pugna
La administración Biden-Harris ha implementado el «parole humanitario», un programa que ha permitido la entrada temporal de migrantes de países como Venezuela y Cuba. Sin embargo, Trump se ha comprometido a eliminar este beneficio, argumentando que esas personas no deberían estar en el país. El republicano también busca revocar el Estatus de Protección Temporal (TPS) que otorga permisos temporales a migrantes de países en conflicto.
Control fronterizo y el muro con México
Trump ha vuelto a prometer la continuación del muro fronterizo con México y la reinstauración de políticas como el Título 42, que permite expulsar rápidamente a migrantes en situaciones de emergencia sanitaria, y el programa «Permanecer en México», que obliga a los solicitantes de asilo a esperar su proceso en territorio mexicano.
En contraste, aunque la administración actual mantuvo algunas restricciones durante un tiempo, Harris ha sugerido que estas normas se mantendrán con ajustes. No obstante, la postura de los demócratas también ha adoptado un tono más restrictivo, buscando inscribir algunas de estas medidas en la ley de forma permanente.
NAM/Agencias
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