Caracas.- La movilización de este jueves convocada por la oposición hasta el Distribuidor Altamira y que luego fue replanteada para dirigirla hasta la Defensoría del Pueblo, ubicada en el centro de la ciudad de Caracas, fue dispersada en la Autopista Francisco Fajardo a la altura de Bello Monte por funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y Policía Nacional Bolivariana (PNB).
Un piquete de la Guardia Nacional en la Autopista Francisco Fajardo a la altura de El Recreo, Bello Monte, lanzó gran cantidad de bombas lacrimógenas para dispersar a los opositores.
Los dirigentes políticos que guiaban la marcha buscaban vías alternas para continuar con el camino; sin embargo, Plaza Venezuela, una de las opciones para continuar la movilización, también estaba cerrada por efectivos de seguridad.
El diputado al Parlamento, Miguel Pizarro, lamentó “el papel de las fuerzas del orden público” por ni siquiera permitir el acercamiento de los dirigentes políticos a pedirles acceso a las vías.
“Luchar por la resistencia, es un camino largo pero hay que mantenerlo en paz. No se puede caer en el peine de la violencia porque estas confrontaciones buscan mostrar que estamos desde la violencia y no es así», aseguró Pizarro, al tiempo que pidió a los ciudadanos mantener la «resistencia».
Más tarde, el gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles Radonski, denunció la agresión por parte de la GN y PNB con bombas lacrimógenas y perdigones. Asimismo dijo sentir “vergüenza” por el actual Gobierno del país.
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